Los empresarios de la provincia exigen al Gobierno medidas compensar el cese total de las actividades consideradas "no esenciales" en las próximas dos semanas y la consiguiente ausencia de ingresos en este tiempo, y hacer posible que tengan liquidez. Con ello se favorecería, tal y como han apuntado a este periódico representantes de diferentes patronales, que una vez pasada la crisis sanitaria del coronavirus puedan retomar su labor con garantías de afrontar sus gastos, teniendo en cuenta que, aun en el caso de que no se hubieran paralizado aún por completo, la actividad en muchas de ellas ya se había detenido a causa de la pandemia.

El presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) en la provincia de Alicante, Perfecto Palacio, cree que esta situación va a suponer "un shock importante" y que "va a tener consecuencias", ya que "no es lo mismo tener un motor al ralentí que pararlo", en alusión a lo que se había venido aplicando las dos últimas semanas. El responsable de la principal patronal autonómica entiende que "lo más importante es parar la pandemia", pero critica que no se haya pensado en las contrapartidas de paralizar por completo la actividad y, sobre todo, lamenta que el Gobierno "ha actuado de forma unilateral y ha roto el diálogo social, y no es momento de ello".

Palacio añade que las empresas "no se pueden parar de un día para otro" por cuestiones técnicas o logísticas y que, aparte de eso, hay que pensar en su liquidez para afrontar pagos, y "si no hay movimientos, esa liquidez es cero". Por ello, considera que la decisión anunciada ayer por el presidente Pedro Sánchez "parece algo improvisado".

En una línea parecida se muestra el presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ), José Antonio Pastor, quien incide en la necesidad de liquidez de las empresas. Muchas de ellas ya habían parado su actividad ante las cancelaciones de pedidos o los impagos, explica, por lo que ahora pueden estar planteándose cómo afrontar sus gastos. Por ello, cree que "hay que redistribuir el presupuesto nacional" para afrontar la situación. En el sector del juguete, añade, al no ser ahora mismo temporada alta de producción, se ha optado de forma mayoritaria por adelantar las vacaciones de verano a estos días, con la esperanza de poder trabajar durante el verano.

También la presidenta de la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal), Marián Cano, estima que, si bien "la prioridad es la crisis sanitaria", desde el Gobierno "se tienen que articular medidas para afrontar esta situación" y "hay que agilizar todos los trámites de apoyo a las empresas", dando también alternativas como flexibilidad en los plazos para el pago de tributos. Este sector, señala, "de alguna manera ya estaba parado, desde el momento en que se cierra el comercio"; en las últimas semanas ha habido ya numerosos pedidos devueltos. Además, recuerda, "el consumo de moda no es algo que se aplace", por tratarse de un producto de temporada, por lo que "habrá que ver cómo queda la situación después".

También la patronal hotelera de Benidorm y comarca, Hosbec, considera que el Gobierno "se equivoca al hacer recaer todo el coste de la crisis en las espaldas de las empresas". Aunque deja claro que el sector "cumplirá escrupulosamente todas las medidas que se tomen", critica con dureza que "ni una sola de las medidas tomadas por el Consejo de Ministros beneficia a las empresas, más allá de un ERTE por fuerza mayor con condiciones más que discutibles", pese a que el turismo, recuerda la entidad, supone el 14% "del tejido productivo que sostiene este país".

Por ello, desde Hosbec afirman que "nos sumamos a las opiniones de otras organizaciones empresariales como CEV al poner de manifiesto que el Ejecutivo vuelve a generar incertidumbre", al anunciar "un parón de actividad sin concretar qué se consideran actividades esenciales". Tampoco se tiene en cuenta, añaden, que el "correcto funcionamiento" de éstas "requiere de las no esenciales, lo que demuestra un completo desconocimiento del tejido empresarial".

Para la asociación "echamos de menos medidas valientes de protección de nuestras empresas, como lo han hecho otros países europeos", así como "medidas de control del superfluo gasto público innecesario en estos momentos". En este sentido, apostillan que "no es posible que trabajadores y empresas estén ajustando cinturones hasta la extenuación y que todo el sector público no haya tomado ni una sola medida de reducción del gasto innecesario".

Más comedido es el secretario general de la Asociación de Promotores de Viviendas de Alicante (Provia), Jesualdo Ros, quien de momento no entra a valorar la decisión del Ejecutivo y explica que la entidad se pronunciará al respecto en próximos días. No obstante, el sector "acata lo que diga el Gobierno", aunque "hasta ahora nos parecía prudente y adecuado seguir la actividad".

Garantías para salvar los empleos

Sin embargo, los sindicatos mayoritarios aplauden la decisión del Gobierno, al considerar que va en la salvaguarda de la salud de los trabajadores y que garantiza la continuidad de los puestos de trabajo. La secretaria general de UGT en l'Alacantí, Yaissel Sánchez, cree que restringir la actividad es "una medida positiva para frenar la pandemia" y favorecer que "se contagien los menos trabajadores posibles". Además, destaca que "se mantienen las actividades esenciales", lo que hace que "la economía no se pare del todo".

Sánchez destaca que "se está pensando en los trabajadores" al hacer que se queden en casa pero cobrando su sueldo, de manera que "nadie se quede atrás". Al respecto, incide en que "si no tenemos renta se retrae todo, porque no consumimos", y destaca que la garantía de mantener los puestos de trabajo "contribuye a que después nos podamos recuperar pronto".

Por su parte, la secretaria general de CC OO en l'Alacantí-les Marines, Consuelo Navarro, cree también que "las medidas son adecuadas" y que "el Gobierno ha recogido las peticiones realizadas desde el ámbito del trabajo". Al respecto señala que "hay actividades que si no son esenciales en este momento no tienen por qué realizarse", y que una vez pasada la crisis "la negociación colectiva ya nos dirá cómo recuperar las horas" que no se trabajen estas semanas.