El coronavirus ha abierto un nuevo escenario en el Ayuntamiento de Alicante, pendiente de aprobar el Presupuesto de 2020. El gobierno municipal no descarta ahora prorrogar las actuales cuentas hasta 2021 para centrar todos los esfuerzos técnicos y políticos en poner en marcha mecanismos de ámbito local para hacer frente a la crisis derivada del Covid-19. En cambio, no se plantea devolver a la casilla de salida para reelaborar el proyecto de Presupuesto de 2020, que actualmente se encuentra en la fase de enmiendas.

En concreto, los técnicos de Hacienda están estudiando desde hace algo más de una semana las propuestas elevadas por la oposición (PSOE, Unidas Podemos, Compromís y Vox), que debería desembocar en la convocatoria de la Comisión de Hacienda, donde los grupos votarán las iniciativas presentadas al texto redactado por el equipo de gobierno. El siguiente paso sería el Pleno, que llegó a plantearse para esta semana y donde el bipartito necesitaría la abstención de un grupo para aprobar los Presupuestos de 2020, que no entrarán en vigor antes de mayo. De esa aprobación, entre otras cuestiones, está pendiente el aumento de la partida destinada a la limpieza y recogida de residuos.

Ésa era la única línea en la que trabajaba el bipartito hasta la irrupción del coronavirus, con sus derivadas sanitarias y económicas. Ahora, en Alcaldía no se descarta aparcar el proyecto del Presupuesto de 2020 y apostar por prorrogar las actuales cuentas hasta 2021 para así centrar las energías en implementar los mecanismos para hacer frente a las consecuencias del Covid-19. El bipartito trabaja con los técnicos de Hacienda en decidir las mejores fórmulas económicas, con la vista puesta en el remanente de tesorería de 2019 y en modificaciones de crédito puntuales. En el gobierno asumen que el coronavirus ha hecho saltar por los aires los proyectos previstos para las próximas fechas en Alicante. A partir de ahora, el principal objetivo será dar solución a los problemas provocados por la crisis del coronavirus.