El sector turístico completa casi al 95% el proceso de cierre de establecimientos hoteleros y durante el fin de semana el cierre llegará al 100%. Este proceso se ha culminado con celeridad, con la mayor normalidad posible dentro de la situación de alarma en las que nos encontramos, demostrando el sector la mayor profesionalidad y colaboración, según acaba de informar Hosbec en un comunicado.

El proceso de cierre de establecimientos hoteleros y alojamientos turísticos se está culminando cumpliendo los plazos previstos y autorregulados por el sector hotelero, adelantándose a cualquier decisión administrativa que se pueda acordar y publicar en los próximos días.

Con esta decisión el sector se ha adelantado a un procedimiento de cierre posterior que hubiese sido más traumático por la complicación de los cierres de fronteras, las complicaciones en los aeropuertos y los recortes de vuelos de las diferentes compañías.

Esta visión 'adelantada' ha permitido prácticamente en un tiempo récord poder repatriar a todos los turistas y clientes que disfrutaban de su estancia en nuestros establecimientos.

Según la estadística que hemos cerrado, el volumen de hoteles y alojamientos turísticos que han programado su cierre es el siguiente:

Cerrados a fecha de 18/03/2020 158Cierran el 19/03/2020 22Cierran el 20/03/2020 11Cierran el 21/03/2020 8Cierran durante la próxima semana 12

Los establecimientos que permanecen abiertos no lo hacen a plena capacidad, sino que permanecen abiertos para atender a los pocos clientes que todavía se encuentran alojados esperando su vuelo de salida o su transporte a su lugar de origen.

En este proceso hay que agradecer la colaboración que han prestado todos los turoperadores y agentes de viaje, la comprensión de los propios turistas, y sobre todo la profesionalidad y dedicación de todas las plantillas de los hoteles que, a pesar de las difíciles circunstancias que estamos viviendo, han sacado lo mejor de sí mismos para atender a todos los clientes hasta su salida.

La medida acordada como recomendación por Hosbec el pasado domingo ha sido acertada a la vista de la evolución de la pandemia del coronavirus en nuestro país. La actividad hotelera y la vacacional en particular, es absolutamente incompatible con las medidas de restricción de movimientos y de confinamiento domiciliario de la población decretada por el Gobierno el pasado sábado en un Consejo de Ministro extraordinario. Y haber permanecido abiertos hubiera sido una temeridad que pondría en peligro no sólo a los clientes, sino a trabajadores y a la población en general y no hubiera contribuido sino perjudicado en el control de la curva de la epidemia comprometiendo la imagen turística de España en los mercados internacionales.

Por este motivo "no entendemos los retrasos del Ministerio de Sanidad o del Consejo de Ministros en declarar el cierre obligatorio de los establecimientos hoteleros y de alojamiento turístico sea cual sea su modalidad y clientela. Si hemos conseguido desalojar a 40.000 clientes en la Comunidad Valenciana, mucho más sencillo debe ser alumbrar una norma jurídica bastante sencilla y que además está siendo demandada por el sector de forma urgente. Las excepcionalidades (hoteles que atienden servicios esenciales para la comunidad) no pueden condicionar la norma general, y deben tener un tratamiento específico. Todo el retraso en esta norma de cierre supone un riesgo para el sector y queremos advertir públicamente de ello".

En opinión de los técnicos de Hosbec, este cierre debe alcanzar también a los campings que albergan a miles de turistas que tienen en sus caravanas, autocaravanas y mobile-tomes su vivienda habitual durante los meses de invierno. La imposibilidad de controlar que en su interior se cumplen las medidas de aislamiento, los aseos compartidos y comunes que usan la mayor parte de ellos, así como la edad de los turistas (+65 años) que los sitúan dentro de la población de riesgo, hace que se deba organizar su cierre ordenado a la mayor brevedad posible. El control de la emergencia sanitaria debe ser lo que prime sobre cualquier interés, incluido las dificultades de regreso a sus países de origen, las horas o días de conducción o cualquier otro motivo.

Por estos motivos, solicitamos a la administración que no puede quedarse inmóvil en estas circunstancias y decrete a la mayor brevedad posible este cierre obligatorio y ordenado, procurando la salida de todos los clientes y la solución de transporte o habitacional que cada uno necesite antes de que la situación esté todavía pero que en estos momentos.

La patronal hotelera de la Costa Blanca prevé que la próxima semana, una vez se hayan cerrado los pocos establecimientos que quedan abiertos en la provincia, la clausura será total con unos diez mil trabajadores, además, temporalmente en el paro debido a los Ertes, que ya han comenzado a presentar la empresas a las que las medidas drásticas contra el coronavirus coronavirusles ha pillado en el inicio de la temporada alta con la Semana Santa, fines de semana de ocupación al cien por cien y un negocio paralelo, como son los banquetes de bodas y comuniones arruinados, porque aunque en el mes de mayo se pudiera empezar a abrir, nadie sabe qué restricciones sobre reuniones y consumo seguirán en pie. Los diez mil empleos suprimidos son directos pero se ve afectada también toda la industria auxiliar vinculada a los hoteles como son los proveedores y lavanderías, por lo que el impacto económico es brutal.

En el aeropuerto poco a poco se va reduciendo la programación y hoy tan solo está previsto que operen 86 aviones (llegan y se van) para seguir con la repatriación, ya más ordenada, de los turistas. El cierre de los hoteles tiene otra derivada negativa y es el hecho de que, por ejemplo, pilotos y maquinistas se quedan sin los lugares donde acostumbran a pernoctar al acabar la jornada.

Las dos patronales hoteleras alicantinas -Hosbec y Asociación Provincial de Hoteles- han puesto a disposición de las autoridades sanitarias los establecimientos pero fuentes de ambas asociaciones coinciden al apuntar que "confiamos que no sea necesario recurrir a esta medida porque los hoteles son hoteles y no están acondicionados para servir de hospitales, pero si nos los piden ahí estaremos". Los hoteles de Alicante, a punto del cierre completo, han tenido una loable iniciativa como ha sido donar colchones, sábanas y otros artículos para el polideportivo de la Florida que está equipando el Ayuntamiento.