Poco a poco, miles de turistas van abandonando escalonadamente la provincia de Alicante, en un operación de repatriación en la que el aeropuerto de Alicante-Elche se ha convertido en una pieza estratégica como lo demuestra el hecho de que desde esta mañana se haya desplegado en la terminal la Unidad Militar de Emergencias para mantener el orden y en labores de desinfección. El primer país que ha pedido a sus ciudadanos que vuelvan es Noruega y esta misma mañana está previsto el despegue de un Boeing 787-9 Dreamliner enviado por la compañía Norwegian con capacidad para 344 pasajeros y destino Oslo. Norwegian está trabajando para implementar soluciones similares en otras rutas. La imagen del aeropuerto es casi apocalíptica con miles de pasajeros en busca el mostrador para facturar los equipajes y autobuses trayendo turistas contíuamente.
A las ocho de la mañana se han implementado controles de fronteras en Noruega, y sólo se permite la entrada a los ciudadanos noruegos (a quienes se les recomienda volver a casa lo antes posible) así como también a los ciudadanos del Espacio Económico Europeo (la Unión Europea, más Islandia, Liechtenstein y el Reino Unido) con empleo o residencia en Noruega, y también a sus familias.
El golpe al sector turístico y al resto de la economía de la provincia es hoy incalculable, tanto en cifras como en imagen reputacional. José María Caballé, presidente de la cadena Servigroup, insiste en que "es necesario un cierre ordenado, tanto porque las condiciones no son las ideales, como por el compromiso que tenemos con nuestros clientes. Hemos tenido una reunión con todos los directores y como todavía teníamos unos mil quinientos turistas alojados y sin posibilidad de irse con rapidez hemos optado por ir concentrando todas las operaciones en un solo hotel hasta el lunes, cuando está previsto que se vaya el último grupo". Otra de las medidas adoptadas es cambiar todas las reservas que había suscritas hasta junio. "Estamos ofreciendo la cancelación o el cambio de la reserva para toda fecha, a partir de junio cuando ya esperamos que toda esta pesadilla haya acabado".
La Asociación Provincial de Hoteles de Alicante -8.000 plazas repartidas por Alicante y toda la provincia salvo Benidorm- va cerrando también los hoteles de manera general debido a que todavía tienen muchos clientes alojados -algunos establecimientos tenían, por ejemplo, ayer hasta 200 clientes alojados-. "Muchos turistas que no tienen sus vuelos de regreso a sus países, por ejemplo, hasta el próximo fin de semana, por lo que vamos a seguir trabajando para ellos con todas las medidas de seguridad higiénica y de prevención que ha impuesto Sanidad", apunta Victoria Puche, pepresidenta de los hoteleros.
Por su parte, los trabajadores que desempeñan su labor en el aerpuerto continúan denunciando el hecho de que la gente siga saliendo y entrando del país en plena pandemia, aglomeraciones, descontrol, y trabajadores asustados que lo único que quieren es encerrarse en casa y esperar que todo esto pase. Ahí es dónde entran los "otros héroes" esos "tiramaletas", coordinadores de vuelo, TPC, "pasatarjetas de embarque", dependientes, seguridad, limpieza, etc... Personas expuestas a un continuo tráfico de personas de distintos países, ignorantes de si estan contagiadas o no. Añadiendo sus enfados por cancelaciones, colas, retrasos, carga de equipajes, y masificaciones. Y todo esto con las medidas mínimas marcadas por la OMS.
"Un desborde laboral imnecesario, expuestos a una situación de riesgo mundial, del cual el Gobierno parece estar ausente. ¡Ah! Y cuando saquemos a todo el mundo de España, entonces cerraremos el espacio aéreo y harán sus respectivos ERTEs y a casa por un sueldo indigno. Cerremos el espacio aéreo, estamos dispersando el virus! Solo pedimos racionalidad. Lo único que nos queda es poder decirles a nuestros nietos que cuando se paralizó el mundo en 2020 y únicamente gente que mantenía el orden, sanaba a las personas o abastecia a los que lo necesitaban, su abuelo o abuela atendía a gente que en lugar de viajar podría estar 10 o 15 días en un hotel, o en su primera o segunda vivienda esperando que todo esto pasase o se controlase", han expresado un grupo de trabajadores a este periódioco.
La situación, sin embargo, ha mejorado mucho en las últimas horas gracia al desplieguen la terminal de efectivos de la Policía Nacional en un operativo coordinado por la directora del aeropuerto, Laura Navarro, y el comisario provincial. Los agentes han puesto orden e informan a los turistas de las medidas de seguridad.
Por último, los trabajadores del aeropuerto consideran irresponsable que siga abierto el Burger King de la zona embarque aunque desde se hahan tomado medidas seguridad inexistentes durante el fin de semana. La hamburguesería se mantiene abierto porque en el decreto se la considera como un punto esencial para facilitar comida y bebida a las miles de personas que pasan estos días por la terminal.
