n El Gobierno de Murcia decretó ayer el confinamiento en el litoral de la comunidad, una medida drástica que afecta a una población de unas 376.000 personas de los municipios de Cartagena, San Javier, San Pedro del Pinatar, Los Alcázares, La Unión, Mazarrón y Águilas, en los que no habrá «libertad de movimiento» y se cerrarán todos los negocios a excepción de comercios de alimentación y farmacias.

El presidente de la comunidad autónoma, Fernando López Miras, convocó una rueda de prensa de urgencia para anunciar esa medida que adoptó por la «irresponsabilidad» del gran número de personas procedentes de la Comunidad de Madrid que se han tomado la cuarentena como unas «vacaciones». Además, advirtió de que las medidas se podrían ampliar a otras zonas de la Región si continúan las actitudes irresponsables y no se cumple con las recomendaciones de aislamiento.

Solo se podrá entrar y salir en los municipios afectados por la medida por motivos laborales o sanitarios y, dentro de esas localidades, los desplazamientos se limitarán a la compra de alimentos o medicamentos o a recibir atención sanitaria. Aquellos que no vendan alimentos o fármacos se cerrarán al público y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado establecerán controles para asegurar el cumplimiento de la medida, que entró en vigor ayer.

El número de infectados por coronavirus en la región se elevó ayer a 39 tras sumar tres nuevos casos en las últimas horas.