Cinco locales de ocio de la calle Castaños tendrán que retirar sus veladores por orden del Ayuntamiento de Alicante. Y todo porque están ejerciendo la actividad de manera irregular, según se detectó en recientes inspecciones nocturnas derivadas de denuncias vecinales. Así consta en los decretos de suspensión de actividad, firmados por el concejal de Urbanismo, Adrián Santos Pérez, que agentes de la Policía Local entregaron ayer a los locales afectados. En los escritos, se recogen los motivos del cese de actividad de las terrazas, entre los que destacan la falta de licencias o de aseos públicos, además de que mesas y sillas ocupen vías de paso o de evacuación.

Esta decisión del Ayuntamiento de Alicante se produce en pleno proceso de estudio de las medidas que debe implantar el bipartito para reducir el ruido en el entorno de Castaños. Decisiones que no se deben prolongar en el tiempo ya que una sentencia judicial (eso sí, recurrida tanto por el gobierno municipal como por la asociación de locales de ocio -Alroa-) condena al Consistorio alicantino a declarar zona acústicamente saturada (ZAS) el Centro de Alicante, en concreto, el área entre las calles San Ildefonso, Castaños, López Torregrosa, Artilleros, Rambla, Pascual Pérez, Teatro, Teniente Álvarez Soto, Bailen, Gerona y San Francisco, excluyendo a su vez el Portal de Elche. La decisión judicial, que se conoció a mediados del pasado noviembre, estimó parcialmente el recurso de vecinos de la zona, requiriendo al gobierno a tomar medidas para recuperar los niveles sonoros que establece la normativa. El juzgado de lo Contencioso número 4 de Alicante dictó sentencia contra el Ayuntamiento por «vulneración de derechos fundamentales».

Un mes antes de conocerse la sentencia de primera instancia, el ejecutivo de Barcala anunció medidas encaminadas a calmar el ruido en el entorno de Castaños.

El concejal de Ocupación de Vía Pública, Manuel Jiménez, explicó que el Ayuntamiento trabajaba con la mente en prohibir aperturas de nuevos pubs y discotecas en el Centro Tradicional, además de reordenar veladores en Castaños y San Ildefonso con un recorte del espacio destinado a mesas y sillas entre un 5% y un 10% para ganar espacio para los peatones. Otra de las medidas que anunció el gobierno fue la creación de una brigada policial nocturna formada por cuatro agentes para vigilar el cumplimiento de los niveles de ruido, que iba a realizar mediciones y levantar actas de infracción.

Advertencia

En las inspecciones realizadas por policías locales la noche del pasado 18 de enero, según consta en los decretos entregados ayer a los locales afectados, los agentes detectaron irregularidades en los veladores, que obligarán a la retirada de las mesas y sillas de zonas de paso. «Requerir para que suspenda de forma inmediata el funcionamiento de la actividad en la terraza descrita en el acta de inspección de actividad por carecer de correspondiente instrumento de intervención ambiental», es el primer acuerdo de los cinco decretos, mientras que otro párrafo común añade: «Se le apercibe de que en caso de incumplimiento se procederá por agentes de la Policía a cumplimentar lo ordenador por el procedimiento de la acción de oficio previo requerimiento, actuando materialmente mediante el precinto de las puertas de acceso a la terraza y -según prosiguen los decretos-, en el caso de que no fuera posible, se procederá al precinto de las mesas y sillas».

Y no sólo eso, sino que se advierte de que en caso de no cumplir con la suspensión de actividad de los veladores se dará «curso a la autoridad judicial por la posible comisión del delito de desobediencia/resistencia tipificado en el artículo 556 del Código Penal», que recoge pena de prisión de tres meses a un año o multa de seis a dieciocho meses a los que «resistieren o desobedecieren gravemente a la autoridad o sus agentes en el ejercicio de sus funciones».

Más controles

Además, en tres de los cinco decretos notificados anoche a locales de Castaños donde se detectaron irregularidades en los veladores también se subraya la falta de aseos públicos. En total, entre los cinco recinto de ocio señalados por el Ayuntamiento por ejercer la actividad de manera irregular suman casi medio centenar de mesas y unas 150 sillas en total, con superficies ocupadas por las terrazas que van entre los seis a los casi veinte metros cuadrados.

Las inspecciones de la brigada policial adscrita a Urbanismo en busca de irregularidades en los locales de ocio continuarán durante las próximas semanas. La siguiente calle en la que actuarán los policías será López Torregrosa, según fuentes municipales.