No es una leyenda urbana. Es una realidad. Contactar por teléfono, a través de la línea directa, con la Policía Local de Alicante es una misión (casi) imposible. Así lo aseguran los ciudadanos y así lo ha comprobado este diario. Hasta diez intentos se hicieron desde la redacción de Doctor Rico en días y horas distintas. ¿El resultado? El esperado tras escuchar las quejas comentadas reiteradamente por los vecinos y los comentarios críticos a la vista de todos en internet.

En uno de los intentos hubo respuesta de una agente: fue el miércoles 12, a las 10.22 horas; en otra ocasión (el lunes 10, a las 13.03 horas) saltó un contestador en el que se informaba de que las líneas estaban ocupadas y de que, si se trataba de una urgencia, se podía contactar con el 112 (el número de emergencias gestionado por la Generalitat). En los restantes ocho intentos (realizados entre los días 10 y 17 de febrero, de nueve de la mañana a diez de la noche), el teléfono sonó, sonó y sonó... sin conseguir respuesta alguna. Y eso que al otro lado del teléfono nunca se sabe si se trataba de una situación relevante, de una simple queja o de una advertencia de peligro. No existe filtro. Todas las llamadas al número directo de la Policía Local (un 965...) llegan a una centralita en la que también se atienden las llamadas que se derivan del 112.

Ante esta situación, tan criticada por la ciudadanía, desde Comisiones Obreras subrayan que el servicio es «totalmente deficiente y da una imagen francamente ineficaz» de la Policía Local. Fuentes del sindicato aseguran que, diariamente, hay entre dos y cuatro operadores de servicio en las instalaciones de Julián Besteiro que «deben atender las llamadas de urgencia del 112, llamadas ciudadanas y atender tres canales operativos para todo el servicio ordinario». Según el sindicato, «cerca de un 40% de las llamadas entrantes carecen de urgencia, suelen ser para pasar a otras unidades como objetos perdidos, oficinas, atestados u otros servicios». Y es que no existe un «discriminador de llamadas», como sí pasa en otras administraciones. Para el sindicato, esa herramienta «serviría para dar un servicio más eficaz y rápido sin necesidad de pasar directamente con la central de radio que debería ser exclusivamente para urgencias ciudadanas, llamadas del 112 y servicio operativo policial».

Desde el SPPLB, por su parte, coinciden en que «el problema está en la central, que no es operativa ya que falta gente y entran muchas llamadas de todo tipo que no se pueden atender».

Ese servicio criticado por los sindicatos ante la falta de agentes es aún más censurado por los ciudadanos, como se puede observar en internet. «No atienden nunca, pésimo servicio... ¡y por esto se pagan impuestos!», «el teléfono se ve que lo tienen sólo para decorar», «no cogen en el teléfono, si te estás muriendo llama al Telepizza, por lo menos te atenderán», «23 llamadas y ni una sola respuesta; vergonzoso el servicio; parece que los lunes a las dos de la mañana están colapsados... Patético», «¿Se puede saber dónde hay que llamar para que te hagan caso?», «Da igual a la hora que llames y cuántas veces lo hagas, no obtendrás respuesta», «No contestan las llamadas telefónicas de ninguna manera. Dos días seguidos intentando contactar con ellos», «Venga llamar y no hay forma de que cojan el teléfono... ¿Se puede saber dónde tengo que llamar? ¿Esto es de verdad? He llamado más de diez veces», «Llamando y llamando por una urgencia y no lo cogen. Así tres cuartos de hora», «Nefasto, más de media hora llamando y no lo cogen. El tiempo que me han tenido sin poder sacar el vehículo porque otro coche estaba aparcado en doble fila y se ha ido de rositas. Pero yo he llegado tarde al trabajo», «Puedes estar llamando días enteros a diferentes horas que cogerán el teléfono cuando les de la gana», «Llevo siete llamadas y no cogen el teléfono, es vergonzoso; si no dan a basto, que el Ayuntamiento ponga mas personal»... Y así decenas de mensaje desde hace años que se acumulan a modo de queja por el servicio. Y sin cambios desde la Policía Local, salvo que tras cuestionar este diario los problemas derivados del servicio, desde la Jefatura procedieron a modificar el sistema para que saltara el contestador siempre que el operador no pueda atender la llamada. «Al menos, que no parezca que el agente no coge el teléfono porque no quiere, sino que se vea que están las líneas ocupadas», señalaron desde el cuerpo local de seguridad ciudadana.

Desde la concejalía que dirige el popular José Ramón González señalaron que el «teléfono de emergencias es el 112» y que el «teléfono de la Policía Local es un servicio adicional que cuenta con cinco líneas de atención y un contestador en caso de que estén todas ocupadas, pero no es un teléfono de emergencias». Falta por concretar qué es una emergencia y, sobre todo, que el ciudadano tenga claro cuándo debe comunicar con el 112 y cuándo con el número directo de la Policía Local.