El año 2020 se estrenaba con la histórica liberalización de los peajes en la autopista AP-7 entre Alicante y Tarragona después de más de 40 años pagando por utilizar esta vía. Casi mes y medio después sin tener que desembolsar dinero por viajar a lo largo de la Autopista del Mediterráneo en este tramo se ha traducido en un incremento del 119% en el tráfico entre Alicante y Valencia, según datos proporcionados por el Ministerio de Fomento. Así, el tráfico en este trayecto ha pasado de una media diaria de 12.783 coches a 28.055.

Si se tienen en cuenta los 374 kilómetros que separan Alicante y Tarragona, el tráfico ha aumentado un 71%, según Fomento. Paralelamente, la circulación ha caído un 30%, especialmente de vehículos pesados, en las vías alternativas a la AP-7, como la que enlaza ambas provincias por el interior o en algunos tramos de carreteras nacional N-332 en Benidorm y La Vila Joiosa. En esta última, la circulación de vehículos pesados se ha reducido un 61% respecto al mes de enero del año pasado.

La liberalización definitiva de los 374 kilómetros de la AP-7 entre Tarragona y Alicante ha significado que circular por la red de carreteras del Estado de la Comunidad sea un 93% más barato en la Comunidad Valenciana y un 14% en el caso de Cataluña. El Ministerio de Fomento señala que la medida supone un ahorro anual de 300 millones de euros para los usuarios residentes en la Comunidad y de cien en el caso de los conductores de Cataluña.

Después de este casi medio siglo de pago para poder circular por ella, tras la liberalización de la Autopista del Mediterráneo, es el Ministerio de Fomento quien asume su mantenimiento. El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ya ha anunciado que en conservación de esta vía se van a invertir cerca de 21 millones de euros al año en la Comunidad Valenciana. El presupuesto para este fin crece un 30%, por lo que se eleva la dotación para conservar esta vía.

La derivada negativa de este aumento de tráfico en la Autopista del Mediterráneo es el incremento de vehículos pesados que Compromís se hizo eco recientemente de una denuncia de la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España, que criticaba que se están dando problemas de sobresaturación de aparcamiento en las áreas de descanso existentes en la autopista, dificultando que los transportistas puedan realizar los descansos obligatorios, desde que en septiembre de 2019 fueron aprobadas las restricciones a la circulación de camiones de 4 o más ejes por las provincias de Castellón, Tarragona, Lleida y el Sur de Barcelona, mediante la prohibición de su circulación por las carreteras nacionales N-340 y N-240.

Compromís ha presentado una batería de preguntas en el Congreso para conocer qué medidas tiene previstas el Ministerio de Movilidad y Transportes para solucionar estos problemas.