Un juzgado de Alicante ha dado la razón al Club de Regatas en el litigio que mantiene con la empresa que explota el restaurante La Cantera desde que le comunicaran en junio que no le renovaban el contrato de alquiler y ha acordado el desahucio de las instalaciones hosteleras, además de condenar a la sociedad Marinallana al pago de las costas procesales.

Así lo anunció ayer tarde el Club de Regatas tras conocerse una sentencia dictada por el juzgado de Primera Instancia número 4 de Alicante sobre la solicitud de desahucio del restaurante La Cantera por extinción del contrato de arrendamiento.

El juzgado de Primera Instancia número 4 de Alicante ha estimado la demanda presentada por el Club de Regatas y declara la resolución del contrato de alquiler con la empresa que ha explotado el restaurante. La juez da por resuelto el contrato del 4 de julio de 2001 y sus sucesivas prórrogas, incluida la última del 8 de agosto de 2018, al haber expirado el plazo pactado.

La magistrada del juzgado de Primera Instancia número 4 condena a la sociedad a desalojar la finca del antiguo Tiro de Pichón y decreta el desahucio de la empresa, «bajo apercibimiento de lanzamiento si no desaloja la finca en el plazo legal».

La empresa Marinallana tiene un plazo de veinte días para recurrir el fallo ante la Audiencia Provincial, aunque ayer tarde indicaron a este diario que no tenían aún conocimiento oficial del fallo y por tanto desconocen cuál será su postura.

Desde el Club de Regatas consideran que, aunque la sentencia puede ser recurrida, dada la contundencia y claridad del fallo «no queda más que esperar que el grupo Marinallana acate la misma y cumpla con sus determinaciones», devolviendo a la entidad las instalaciones que debía haber desalojado ya desde el pasado 8 de septiembre.

El Club de Regatas precisa que la sentencia convalida las actuaciones de la junta directiva y de la asamblea para no renovar el contrato y confirma su legalidad.