Fundación Aquae y la Universidad de Alicante, junto con las empresas Interlab y Labaqua, han puesto en marcha un doctorado industrial sobre microplásticos, centrado en la detección y caracterización de estos residuos inferiores a 5mm que representan un problema ambiental de escala planetaria. Las cifras de los últimos estudios (ONU) estiman en 13 millones las toneladas de plástico que se arrojan al mar cada año.

Los microplásticos representan el 94% de esta descomunal acumulación de basura plástica. Esta investigación tiene tres objetivos: establecer una metodología analítica estandarizada, científicamente validada, que permita recoger y analizar datos sobre los microplásticos de forma homogénea, tanto a nivel de extracción como a nivel de caracterización analítica; evaluar la eficacia de los tratamientos para su eliminación; y analizar los efectos sanitarios y medioambientales de los principales microplásticos identificados en todo el ciclo. Según explica Débora Sorolla, la doctoranda becada para realizar esta investigación, «la comunidad científica lleva años reivindicando un protocolo de actuación estándar que sirva de referencia para todos los que estudiamos estos microresiduos. Por este motivo, nos parecía importante centrarnos en una materia sobre la que existen tan pocos estudios en España. Nuestra investigación sigue la línea marcada por los trabajos realizados hasta la fecha, la mayoría en países como Estados Unidos o Alemania, aunque nuestro reto es ir mucho más allá».

Este Doctorado, que durará tres años (2020-2022), se centra tanto en los microplásticos primarios (llegan al medio ambiente igual que se fabricaron) como en los secundarios (se degradan o se separan de grandes estructuras sintéticas). «Este estudio dará continuidad a los trabajos que ya se han realizado en Labaqua y en el grupo Suez sobre la identificación y análisis de los microplásticos en el medioambiente, situándonos como referentes de las empresas medioambientales», indica el Dr. Julio Llorca, jefe del departamento de Cromatografía de Labaqua y codirector de la tesis doctoral de Débora Sorolla. Por su parte, Dolores Lozano, Catedrática de Química Inorgánica de la UA y codirectora de esta tesis, apunta que «la investigación desarrollada en el marco de este Doctorado Industrial tendrá un gran impacto científico y tecnológico y, además, jugará un papel clave en la concienciación social».

El Doctorado se divide en tres fases: en la primera, se creará y validará una metodología analítica para determinar, entre otros aspectos, el tipo de plástico. La segunda estudiará el impacto de los microplásticos en instalaciones reales como depuradoras y, en la tercera, se evaluarán los efectos sanitarios y medioambientales.