El ciclo "Arte & Creencias", organizado por Comisión para el Diálogo entre la Fe y la Cultura de la Diócesis de Orihuela-Alicante, contará mañana miércoles día 5 con una nueva sesión. Se trata de un recital sobre la música en las distintas confesiones y celebraciones religiosas. Correrá a cargo de la Mesa Interreligiosa de Alicante (MIA). El director del Secretariado Diocesano de Música, Jesús Rosillo, será el encargado de la presentación del acto, que tendrá lugar a las 19.15 h, en la sede de la Universidad de Alicante de la calle Ramón y Cajal.

Estas jornadas comenzaron el pasado 22 de enero con una mesa redonda titulada "La relación histórica entre arte y creencias". En este foro se debatió en torno a la conexión existente entre estos dos ámbitos a lo largo de los siglos y contó con la participación de: José Alberto Cortés, director del MARQ, y José A. Martínez, director del Museo Diocesano de Arte Sacro, moderados por Ginés Pardo, presidente de la Comisión Fe-Cultura.

La tercera y última de las sesiones de este ciclo anual será el príoximo miércoles 19 de febrero, con el título "Distintas maneras de ver el arte religioso". La presidenta del Colegio de Médicos de Murcia, Trinidad Herrero Ezquerro, ofrecerá la conferencia "La experiencia de miradas ante el Juicio Final de Miguel Ángel", basada en una investigación. En este caso, moderará la doctora en Neurología Ana Pampliega.

En el marco de las actividades previstas para este Ciclo Fe y Cultura, también se ha programado un certamen fotográfico sobre "Arte y Creencias". Se está desarrollando durante este mes de febrero. El fallo del concurso y la exposición de las obras tendrá lugar en marzo, en la citada sede de la UA.

Vida consagrada

La Diócesis de Orihuela-Alicante ha celebrado o más a la Jornada Mundial de la Vida Consagrada que instauró el Papa Juan Pablo II en 1997, este año con el lema "La vida consagrada con María, esperanza de un mundo sufriente".

El pasado sábado tuvo lugar el encuentro de Vida Consagrada, en Las Salesas, Orihuela, mientras que el domingo, el obispo diocesano, monseñor Jesús Murgui, presidió una eucaristía en la Concatedral de San Nicolás de Alicante con representantes de las diferentes realidades de vida consagrada de la Diócesis de Orihuela-Alicante.

La realidad de la Vida Consagrada en la Diócesis de Orihuela-Alicante es muy variada. Hay once monasterios de vida contemplativa en ciudades como Orihuela, Alicante, Altea, Elche, Onil y Villena. Dedican su vida especialmente a la oración por la Iglesia y el mundo.

Por otro lado, en cuanto a la vida activa, están las comunidades masculinas: agustinos, asuncionistas, capuchinos, franciscanos, jesuitas, maristas, mercedarios, misioneros claretianos, misioneros de la consolata, reparadores y salesianos. Prestan un servicio a la Iglesia en parroquias, colegios, pastoral penitenciaria, pastoral gitana, pastoral juvenil, formación, pastoral social, retiros, ejercicios y otras labores pastorales

Las comunidades de religiosas de vida activa - como calasancias, carmelitas, carmelitas misioneras, carmelitas misioneras teresianas, discípulas de Jesús, franciscanas de la Purísima, hermanas de la Doctrina Cristiana, hermanas de Betania, hermanitas de los Ancianos Desamparados, Jesuitinas, Jesús María, Josefinas, Oblatas, misioneras de María Juana Coeli, avemarianas, Salesianas, Salesianas del Sagrado Corazón, San José de Cluny, Siervas de Jesús o Pro Eclesia Santa - prestan un gran servicio a la Diócesis y a la sociedad.

Desde la atención de residencias de ancianos hasta la pastoral penitenciaria, pasando por la docencia en numerosos colegios, la atención de casas de espiritualidad, a parroquias o sacerdotes. También desarrollan su misión en el ámbito de la sanidad (psiquiátrico, hospital), en el trabajo con grupos con riesgo de exclusión social (obras sociales, acogida a mujeres maltratadas), atienden a enfermos pobres incurables (como es el caso de las Servidoras de Jesús del Cottolengo), llevan adelante iniciativas de pastoral en el mundo gitano, en el mundo obrero, en la pastoral de la cultura y en la atención a santuarios y lugares de culto.

En la Diócesis trabajan además otras comunidades con una gran labor social, caritativa y educativa como son las llamadas Sociedades de Vida Apostólica, las Hijas de la Caridad, los Institutos Seculares o las Vírgenes Consagradas Seglares.