Adiós a los accidentes de tráfico en la rotonda de los líos. Cero siniestros, cero, desde que el Ministerio de Fomento reordenó la circulación en la glorieta de la Universidad de Alicante (UA) el pasado mes de julio.

Transcurridos cuatro meses, en octubre, según los últimos datos que proporciona el Ministerio, no había tenido lugar ningún accidente en la que Tráfico y los expertos denominan como «turbo rotonda». Ni en el interior ni en sus accesos desde la A-77 o desde los ramales.

Estos datos contrastan con los del mismo periodo del año anterior, en 2018, en que se produjeron una veintena de accidentes, la mitad de ellos con víctimas (ver cuadro adjunto). Así, entre los meses de julio y octubre hubo ocho siniestros en el interior de la rotonda, dos de los cuales con víctimas.

Además, en el acceso a la glorieta desde los ramales, ya sea el de Rabasa, la salida de la UA o el de parque de bomberos de San Vicente, hubo cuatro incidentes, la mitad con víctimas. Por último, los accesos a la rotonda por la A-77 desde el túnel de Sant Joan registraron ocho accidentes, seis con víctimas.

Fuentes del Ministerio explicaron que en ambos periodos están incluidos los accidentes con atestado de tráfico, al tiempo que destacaron que en la actuación en la glorieta de la Universidad «se mejoró la distribución de carriles y la señalización». Las mismas fuentes mostraron su «satisfacción porque se ha conseguido el objetivo» que se pretendía: la mejora en la seguridad vial.

Y eso que los cambios que introdujo Fomento para ordenar el tráfico en el interior de la rotonda por la que circulan 20.000 vehículos cada día de media provocaron desde el primer momento el desconcierto de los conductores, que no terminaban de entender cómo debían circular por la «turbo rotonda».

Líneas continuas

Hay que estar muy atento a las señales horizontales, que dirigen a los automóviles desde la entrada hasta la salida por unos carriles marcados con líneas continuas. Al tiempo, los carteles verticales informan sobre el carril que pueden tomar una vez están dentro.

De hecho, hay una regla básica en la turbo rotonda, cuyo objetivo es permitir que la circulación fluya más rápido: antes de entrar se debe de elegir la salida a tomar, ya que una vez en el interior, no se puede cambiar de carril.

Así, si se accede desde la Avenida de la Universidad una señal vertical indica que para ir hacia el campus y hacia la A-?? en dirección a San Vicente del Raspeig hay que tomar el carril de la derecha para entrar en la rotonda, mientras que si la dirección es hacia la A-?? que va hacia Alcoy y Valencia o hacia la A-?? que va a Murcia se debe tomar el carril interior.

Una vez que se entra en la rotonda, los carriles van guiando a los vehículos para evitar que se crucen, con lo que existe una doble línea continua que impide salir del carril antes de tiempo.

Para quienes acceden desde el túnel de Sant Joan d'Alacant o Vistahermosa, el ceda el paso se encuentra señalizado ya dentro de la rotonda y es importante respetarlo porque a escasos metros tienen la salida los que quieren entrar en la Universidad, con el consiguiente jaleo.

Así con todo, conductores habituales inciden en que han extremado las precauciones, un factor clave para que no se haya producido ningún accidente de tráfico en los primeros meses, ya que se lían en las señalizaciones y optan por circular más despacio.

Es el caso de Gerardo Pérez, que coche su coche para ir a trabajar desde Sant Joan hasta Alicante y que pasa por la rotonda todos los días. «Es un lío, yo voy más despacio que antes porque no me aclaro, hay un momento que no sé si tengo que seguir o ir a la izquierda».

O el de Asunción García, estudiante en la UA, para quien «entrar o salir se ha convertido en una pequeña pesadilla, voy con mil ojos y me cuesta tomar la decisión de incorporarme a la rotonda».