La empresa adjudicataria de las luces de Navidad ha colocado esta tarde la guirnalda que el viento tiró el pasado sábado, concluyendo así la instalación de un polémico alumbrado navideño marcado por los retrasos. Operarios de la empresa han colocado el arco que cayó la tarde del sábado, obligando a cortar el tráfico, lo que generó importantes atascos en una jornada comercial en la capital alicantina.

Y todo porque la polémica generada por la tardía instalación de la iluminación navideña en las calles de Alicante vivió el sábado su último episodio con la caída de una de las tiras de luces instaladas en Alfonso el Sabio, concretamente en su confluencia con la calle Ángel Lozano. Las fuertes ráfagas de viento que azotaron la ciudad, con rachas de más de 70 kilómetros por hora, provocaron el desprendimiento completo de una de las guirnaldas y un gran atasco en las principales arterias del centro de la ciudad.

Dos dotaciones de bomberos, que tuvieron que realizar hasta 15 intervenciones en un breve periodo de tiempo a causa de los efectos del viento -cristaleras, una cornisa, caída de una palmera en la avenida de Niza-, retiraban las luces de la calzada y trataban de reponerlas, mientras que tres patrullas de la Policía Local cortaron el tráfico en ambos sentidos de la avenida.

Técnicos del Ayuntamiento de Alicante contactaron esa misma noche con la empresa instaladora de la iluminación navideña, que ayer procedió a revisar y a asegurar toda la instalación para evitar nuevas caídas como la sufrida el sábado. El último capítulo de una instalación empeñada en mantenerse en el centro de la polémica.