Entre los casos más llamativos de acoso escolar que se están detectando recientemente en los colegios figura el uso fraudulento del whatsapp para suplantar la identidad de otro compañero del aula y propiciar las burlas y acoso del resto de los alumnos.

El portavoz de los directores de Primaria, Ginés Pérez, señala que llegan a suplantar identidades creando un nuevo perfil con la víctima para focalizar el maltrato, que en estos casos se multiplica por mil por la amplia difusión que favorecen las redes sociales. «Estamos empezando a detectar casos de este tipo para lo que resulta fundamental la colaboración de las familias para evitar de antemano que suceda. Es cuestión entonces de hablar con los niños y todo resulta más sencillo», explica.

Subraya por otra parte que solo se está percibiendo de forma incipiente porque a estas edades, mayoritariamente entre alumnos de sexto curso de Primaria, con 11 y 12 años, todavía no está generalizado el uso del whatsapp como sucede entre los que ya están en el instituto. No obstante en los colegios están ya en modo alerta para tratar de cortar de antemano situaciones de acoso de este tipo.

El representante de los padres de alumnos, Txomin Angós, lamenta al respecto que «desgraciadamente, la edad va decreciendo cada vez más en el uso de internet y los niños tienen móviles desde que tienen menos edad. «Yo puedo confiar mucho en mi hija, pero no en el entorno y debo de ser de los padres raros que se empeña en que su hija use el móvil solo para llamarme, aunque le cueste ser diferente al resto de sus compañeros». Concluye Angós que los padres «debemos ponernos serios, porque aunque todo esté regulado la realidad es más tozuda y habrá que tomar más medidas para poder atajar el acoso».