¿Para cuándo una ciudad con identidad? ¿Para cuándo un modelo urbanístico sobre el que pivote el desarrollo de Alicante? Éstas y otras preguntas se plantearon, y se quedaron sin resolver, durante el homenaje al arquitecto y urbanista Juan Antonio García Solera celebrado ayer en la Sede Universitaria de Alicante, donde se evidenció la necesidad de un nuevo Plan General por lo obsoleto de la actual herramienta urbanística, que data de 1987. Unas carencias para las que no se vislumbra solución a corto plazo.

A lo largo de su carrera, García Solera soñó con un Alicante con personalidad arquitectónica, ordenado, sin parches, nada que ver con la ciudad a la que en sus últimos años, para su disgusto, vio crecer sin orden. Durante el debate de ayer, varios de los ponentes y su propio hijo, el también arquitecto, Javier García-Solera, hicieron alusión al Plan General que le encargó el Ayuntamiento en 1973. Una herramienta que fue inicialmente aprobada pero que acabó en la papelera con el cambio del régimen franquista. «Toda la vida escuché a mi padre hablar de Alicante como una conurbación de barrios, como una ciudad extendida, de Santa Pola a El Campello. Obviamente un plan expresado así podía ser visto con reparo y más viniendo de una época anterior». Otros arquitectos que estaban entre el público valoraron que aquel documento contenía una estrategia para la ciudad pues hacía una simbiosis entre el mar y la huerta, tejiendo conexiones con el territorio. Consideraron que no era solo un desarrollo sino que daba a Alicante una identidad que tenía que ver con su historia, lo que se convertía en su mayor aportación.

Por su legado y por sus ideas, García Solera fue recordado ayer en el Aula de la Ciudad como un humanista que concibió la arquitectura no solo como una herramienta para hacer edificaciones sino como una ciencia y un arte. El director de la Sede, Jorge Olcina, dijo que su obra es un emblema para Alicante mientras que el director general de Contenidos de INFORMACIÓN, Juan Ramón Gil, señaló que el maestro de arquitectos no concebía sus proyectos si no era en relación con la sociedad a la que se los entregaba. Gil leyó una parte del artículo que García Solera publicó en el diario el 3 de junio de 2018 con el título «Alicante: sobre el futuro de la ciudad», y alabó sus reflexiones valientes, corteses y educadas, «sin buscar el enfrentamiento pero diciendo las cosas muy claras». Aquel artículo concluía que a Alicante le falta identidad. Una ciudad que «parece que se autodestruye y se vuelve a construir cada día, y que no está planificada bajo ningún criterio». Y criticó la ausencia, ayer, de representantes del Ayuntamiento.

El urbanista José Ramón Navarro Vera recordó con emotividad que García Solera diseñó la casa familiar de sus padres en Elda y que influyó en su vocación. «Decía que el objetivo de un Plan General iba mucho más allá del orden y la disciplina urbanística, era el destino de sus habitantes. Que una ciudad no son solo calles y plazas, sino vivencias y recuerdos a los que el lugar es propicio».

«La ciudad es un contenedor de inteligencia que se hace vida detrás del diálogo y de la memoria. Ese sentido de la inteligencia está en la obra y en el pensamiento de García Solera», señaló el exconseller y profesor de la Universidad, Manuel Alcaraz.

El periodista Martín Sanz, autor del libro «Testimonio de una época», sobre los 60 años de carrera del arquitecto, explicó que le visitó un mes antes de fallecer y que vio a un hombre «con ganas de hacer planes, de vivir, de seguir generando polémica. Creo que encontró lo que necesitaba en el ámbito familiar y en el social con el homenaje que se le hizo en el ADDA», una de sus creaciones arquitectónicas.

García Solera hijo despidió el acto destacando que en el final de sus días el maestro de arquitectos recordaba sobre todo dos obras que le relacionaron con personas sencillas como el IES Cavanilles y el barrio San Francisco de Sales de Elda, y sobre su aportación a la ciudad y a la profesión dejó una pregunta en el aire: ¿qué hubiera pasado si todos los arquitectos fueran como García Solera?