Un año con el entorno del acceso apuntalado, con vallas que limitan la zona de la cantina por la que pasan cientos de personas a diario. Así se encuentra una parte de los conservatorios de Música Oscar Esplá y Profesional de Danza José Espadero, donde unos puntales dan sujeción a un techo dañado en el que se detectaron problemas hace ahora doce meses. Y desde entonces, nada. Casi nadie sabe nada, mientras los alumnos, sus familiares y los profesores transitan por un entorno que está limitado, con vallas junto a las mesas de la cafetería. «Así está la zona desde hace un año, sin ningún cambio», coinciden alumnos que hacen tiempo en la zona entre clase y clase.
Ya a principios de este año, padres de alumnos transmitieron su preocupación sobre el alcance de dicho apuntalamiento y la tardanza en realizar una intervención porque se encuentra a escasos metros de la cafetería a la que pueden acceder todos los usuarios. Entonces, la directora del Conservatorio Profesional de Danza, María Jesús Morant, afirmaba que ninguna de las aulas del centro se había visto afectada porque el techo desprendido coincide con una zona «muerta» que inicialmente se destinó a sala de Fisioterapia. Dicho espacio se usó también como comedor o área de descanso un antiguo comedor o sala para descanso y refrigerio para alumnos que utilizaban el aula 101 de baile, «pero ya no accede nadie», subraya la directora.
Un año después de que se colocasen los puntales, la Dirección Territorial de Alicante aún no ha recibido el informe técnico solicitado para conocer el extremo del problema sobre el edificio. Fuentes de la Conselleria de Educación aseguran que los técnicos han descartado un posible problema de aluminosis. «Dicho análisis sobre las patologías del edificio aún no se ha entregado de forma oficial a los técnicos de la Dirección Territorial de Alicante que llevan esta actuación, pero ya se cuenta con un avance que establece que el problema de humedad procedía de las aguas que se filtraban por las ventanas de las aulas del piso superior y se descarta también los posibles problema de aluminosis, por lo que la actuación se centrará en las reformas necesarias para poner fin a esas filtraciones», señalan desde la conselleria dirigida por Vicent Marzà (Compromís), que prevé disponer del informe completo en breve: «Está previsto que en una semana se presente ante la Dirección Territorial de Educación en Alicante dicho informe técnico con el análisis patológico del edificio. A partir de ese momento, una vez se conozcan con exactitud las reparaciones a efectuar, la Dirección Territorial elaborará una memoria valorada que defina la actuación y posteriormente se licitará la obra correspondiente».
La Conselleria de Educación añade que la zona apuntalada «se trata de un espacio no docente, puesto que no es un aula, ni tampoco afecta a los pasillos de comunicación del centro, por lo que su cierre temporal no afecta a la docencia». Con todo, se sitúa en una zona muy frecuentada, ya que se encuentra en el entorno de la cafetería del conservatorio, en el porche situado junto al acceso.
Responsables
Desde la Gerencia del conservatorio del Tossal, Maria Moncunill apunta también a la jubilación de la anterior directora territorial como uno de los motivos del retraso, a la vez que subraya que es un «gasto» que corresponde a la conselleria, aunque todavía no se conoce el coste de la actuación y, por tanto, tampoco existe una partida reservada para acometer la obra. Eso sí, la gerente admite que los alumnos, al igual que sus familiares, tienen «todo el derecho a protestar» para conseguir que el centro esté en las mejores condiciones posibles.
Por su parte, el director del Conservatorio Profesional de Danza, Ángel Ramón Martínez, admite que en el claustro no tienen información sobre las intenciones de la conselleria y que siguen a la espera de que se adopten las medidas para solucionar el problema, que tiene apuntalado una zona del centro desde hace un año. «Nosotros no sabemos nada, nadie nos ha dicho nada. Supongo que no habrá dinero», señaló el dirigente del conservatorio, quien a su vez restó importancia al problema, subrayando que no es una dependencia docente y que está vallada para que no pueda afectar a ningún usuario del centro educativo.
