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El precio de las flores para los difuntos sube un 10% pero no se resienten las ventas

La mayoría de tallos que se venden en las floristerías del país salen de una cooperativa de Pilar de la Horadada

Ramos y tallos preparados para salir del almacén que la cooperativa Flomar tiene en Pilar de la Horadada. tony sevilla

Las cooperativas de flores hacen estos días su particular «agosto». Las ventas para el día de Todos los Santos suponen un 20% de su facturación anual. Este año, quienes compren flores para llevar a sus difuntos mañana habrán comprobado una ligera subida de precios en casi todas las especies. El precio de las flores se ha incrementado un 10% en la campaña de este año debido, en cierta manera, a una menor producción. A pesar de esta circunstancia, no se están resintiendo las ventas, todo lo contrario. Los profesionales consultados por este diario coinciden en señalar un aumento de las ventas con respecto al año pasado y, de hecho, en la mayoría de almacenes apenas queda ya género.

Es lo que le ocurre a la mayor cooperativa de flores de la franja mediterránea, Flomar, con sede en Pilar de la Horadada. Desde sus almacenes se han enviado estos días más de un millón de tallos a todos los rincones del país, tanto a floristerías como a comercios mayoristas. La siembra se centraliza en la Vega Baja, principalmente, y en el Campo de Cartagena, las zonas más afectadas por la gota fría de septiembre. Afortunadamente, la mayoría de invernaderos con los que trabajan no se vieron afectados, pero la DANA sí ha supuesto una merma en la producción floral de la zona de entre un 10 y un 15%. «En nuestro caso, hemos podido vender unos 100.000 tallos menos por esa circunstancia», explica el gerente de Flomar, Francisco Carrasco.

El cultivo más dañado ha sido el del gladiolo, una de las flores más demandadas por quienes estos días llevan un recuerdo floral a sus difuntos en los cementerios. Es una flor delicada que ha sucumbido a los trágicos efectos de la DANA y cerca de un 20% de su cultivo se ha visto dañado. «No ha sido un daño que podamos hablar de catástrofe, como en otros cultivos, pero sí ha habido pequeñas pérdidas que llegan hasta el 15% de producción, aunque en nuestro caso con el volumen total que facturamos apenas se ha notado», señala Carrasco.

La campaña está siendo muy similar a la del pasado año incluso, señalan los comerciantes de flores, han experimentado un ligero repunte en las ventas, lo que compensa las pérdidas en las cooperativas de la Vega Baja por los daños de la gota fría. «Se ha vendido todo, hay más demanda este año», asegura el gerente de Flomar. Aunque la cooperativa, que cuenta con 20 socios, tiene un importante nivel de exportación a países como Inglaterra o Italia, para el 1 de noviembre las ventas se centran en el territorio nacional, a comunidades como las de Madrid, Galicia, Cataluña y Andalucía, además de la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia. En estos días la actividad es frenética preparando los envíos para toda España.

Gustos

Los gustos no suelen cambiar y suele demandarse el mismo tipo de flores para dejar a los seres queridos, como son las rosas (sigue siendo el producto estrella), los claveles, las margaritas, lilium, gladiolos y estartices. Aunque últimamente también se reclaman algunas flores exóticas que son de importación como las orquídeas o la esterlicia (conocida como ave del paraíso), pero sus ventas son menores que la de las plantas que se cultivan en el sur de Alicante y en Murcia. Y entra con fuerza una flor que se ha convertido en protagonista esta campaña, el lisianthus, muy similar a las rosas y con un agradable aroma como éstas, pero con un precio menor, lo que hace a muchos decantarse por esta bonita flor para los ramos. En cuanto a los colores, siguen siendo las flores rojas las más demandadas para llevar a los cementerios estos días.

«En general, ha sido una muy buena campaña porque el tiempo ha respetado durante el año y los tallos han florecido en su época, y no se ha adelantado la floración, por lo que son de muy buena calidad», asegura Francisco Carrasco. Para la campaña, las cooperativas aumentan las contrataciones en un 30%. La Vega Baja lidera el mercado de flores por sus temperaturas suaves en otoño, calor en verano y muchas horas de sol, lo que hace a esta comarca ser más competitiva que la del norte y noroeste de la Región de Murcia, otra gran zona productora de tallos.

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