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Los magrebíes señalados en el crimen de Sala dicen que solo buscaban un coche

Uno de ellos contradice al dueño del desguace y asegura que le vio hablando por teléfono junto al negocio donde mataron a María del Carmen Martínez

Uno de los dos ciudadanos magrebíes, Brahim El Gharroubi, ayer tras prestar declaración. rafa arjones

Una de las primeras pistas que siguió la Policía tras el crimen de María del Carmen Martínez fue la de dos ciudadanos magrebíes que estuvieron la tarde del asesinato en el negocio de automoción donde la viuda del expresidente de la CAM Vicente Sala murió de dos disparos en la cabeza. La pista se descartó casi de inmediato, tras comprobar los agentes que los dos hermanos estuvieron durante todo el día recorriendo establecimientos similares de Alicante en busca de un coche y que no tenían nada que ver con el crimen. Ambos declararon ayer como testigos de la defensa de Miguel López, acusado del crimen y yerno de la víctima, en la octava sesión del juicio por el asesinato. Hamid y Brahim El Gharroubi ratificaron ante el jurado que solo fueron a Novocar a mirar un coche y se marcharon al comprobar que nada se ajustaba a su presupuesto. Hamid testificó por videoconferencia desde Ibiza, su lugar de residencia, y Brahim, en la sala.

La pista sobre estos ciudadanos magrebíes fue aportada por otro testigo, Jesús Tavira, propietario de un desguace próximo a Novocar y quien hasta en tres ocasiones prestó declaración por estos hechos ante la Policía. El testimonio de ayer de Brahim fue diferente al relato de Tavira de la semana pasada ante el jurado. El propietario del desguace mantuvo que llamó la atención a los dos hermanos al verles en Novocar porque, precisó, ahí no vendían el tipo de coche que buscaban. Dijo que conocía a uno de ellos porque iba por su negocio y que en alguna ocasión había llegado a robarle.

Brahim, por contra, aseguró ayer que no llegó a hablar en Novocar con Tavira, quien estaba al teléfono en la entrada de las instalaciones. Una vez dentro, la encargada de la recepción le indicó que allí solo había coches de alta gama y ellos tenían un presupuesto de 4.000 euros. Solo cuando se marchaba, aseguró, Tavira se dirigió a él para decirle que le estaba buscando su hermano. Sí coincidieron en que los dos ciudadanos magrebíes habían estado por la mañana en su negocio en busca del coche.

A preguntas de los miembros del jurado, el testigo agregó que conocía al propietario del desguace desde hacía quince años «porque somos vecinos y yo soy mecánico».

El letrado de la defensa, Javier Sánchez-Vera, se interesó por si la Policía les tomó muestras de ADN y huellas y, en el caso de Hamid, si le pidió los billetes del ferry de Ibiza para comprobar las fechas en las que llegó a Alicante. Mientras Hamid respondió que no a ambas cuestiones, Brahim aseguró con cierta teatralización: «pongo todo mi cuerpo a disposición de la Policía para que saquen lo que necesiten y demostrar que no tengo nada que ver con eso».

Ayer también testificaron el médico y el enfermero de la UVI móvil del Samu que acudió a Novocar a atender a María del Carmen tras recibir el aviso de que había una mujer herida por arma de fuego. Según explicó, el Soporte Vital Básico (SVB) había acudido unos siete minutos antes y estaba practicando las maniobras de reanimación. «Cuando ellos llegaron aún estaba inconsciente, con un sangrado importante, pero se fue deteriorando hasta quedar inconsciente», explicó el médico. Estas labores consistieron en la limpieza de las heridas, la apertura de vías aéreas y la introducción de un tubo para que pudiera respirar. El médico de la ambulancia solo pudo certificar la defunción de la víctima ya que cuando llegaron, unos seis minutos, después del SVB, «no había signos vitales».

Tanto en el enfermero como el médico aseguraron que es posible que tuvieran que levantar la ropa de la víctima cuando le pusieron los electrodos a fin de buscar signos vitales. Desde la defensa se ha venido manteniendo que el estado en el que se encontraba la ropa se podía deber a un forcejeo durante un supuesto robo.

Los policías que investigaron el asesinato declaran hoy

Los policías que investigaron el asesinato de María del Carmen Martínez declaran hoy en la novena sesión del juicio, donde serán interrogados sobre los motivos que les llevaron a detener al yerno de la víctima, Miguel López, como único sospechoso del crimen. Los funcionarios responderán a las preguntas del fiscal, de la acusación particular que ejerce Vicente Sala hijo a través del abogado Francisco Ruiz Marco y de la defensa, Javier Sánchez-Vera.

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