Tras la destructora gota fría de septiembre, que anegó la Vega Baja, la provincia esquiva el episodio de lluvias torrenciales que se anunciaba para esta semana tras dejar precipitaciones de hasta 108 litros por metro cuadrado en la Marina Alta,según recogía en su twitter la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), y desplomar los termómetros con máximas por debajo de los 15 grados en Alicante, la mitad que el pasado sábado, y 10,7 grados en Pinoso. La Agencia Estatal de Meteorología y la Generalitat retiraron ayer por la tarde las alertas tras constatar una rápida evolución de la DANA (depresión aislada en niveles altos), que ha dejado lluvias beneficiosas para el campo que vienen a aliviar la situación de los acuíferos.
Según Aemet, hoy miércoles y mañana jueves las tres provincias de la Comunidad Valenciana estarán en nivel verde, lo que significa que no hay ningún riesgo meteorológico.
La DANA dejó grandes cantidades de lluvia en la Marina Alta y no causó destrozos como la letal de septiembre. En la estación meteorológica de Xàbia, situada en el Montgó, la precipitación acumulada fue de 108,7 litros por metro cuadrado, más del doble que en la población, donde se recogieron 49,2 litros. Entre las ciudades, Pego marcó el récord con 90 litros por metro cuadrado en 24 horas.
El temporal de lluvias en el litoral mediterráneo provocó una jornada fría, en la que a las 14.00 horas se registraban 13 grados en València y Alicante, 15 en Castellón y solo cinco grados en la localidad de Castellfort, en la comarca dels Ports. Así lo indicó en su cuenta de Twitter la Aemet, que destacó como otros registros importantes los 70,2 litros de la Vall de Gallinera. Asimismo, cayeron 66 litros en l'Atzúbia y la Vall de Laguar.
En Alicante se recogieron 33,2 litros por metro cuadrado y la lluvia resultó muy positiva para aliviar la situación de los acuíferos.
Hoy no se esperan precipitaciones y si cae algo de lluvia será casi inapreciable, según la Agencia Estatal de Meteorología, que ayer por la tarde retiró los avisos tras el paso de la DANA, que llevó a activar la alerta naranja en Castellón y durante unas horas en el norte de Alicante, por lluvias de 100 litros por metro cuadrado en 24 horas, y la amarilla en el resto de la Comunidad por precipitaciones de 60 l/m2 en el mismo periodo.
En el sur de Alicante, la zona más afectada por la DANA del pasado septiembre, también se recogieron cantidades considerables, como los 35,3 litros de Torrevieja, los 31,7 de la pedanía de la Mata y 16,2 en Orihuela. En el aeropuerto se registraron 32 litros y en Elche una cantidad de 22.
«Es una situación de evolución muy rápida y eso favorece que no se acumulen grandes cantidades de lluvia en la provincia. Salvo en las comarcas del Alcoia-Comtat y Marina Alta, donde los valores pueden rebasar los 100 litros», apuntó Jorge Olcina, director del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante.
Olcina avisó ya ayer que era una gota fría de pequeñas dimensiones y que se movería rápido hacia Cataluña y Baleares. «Esta gota fría no tiene nada que ver con la de septiembre. Ni en tamaño ni en evolución. Aquella fue más grande, más intensa y de mayor permanencia en el tiempo, lo que favoreció las lluvias torrenciales registradas», subrayó el climatólogo. El mar, auténtico catalizador de las tormentas, está mucho más frío que en el último episodio, cuando la temperatura del agua era de 27 grados. El lunes no pasaba de los 24 grados.
Las clases no se suspendieron ni en Elche ni en los municipios de la Vega Baja, pese a que en esta comarca existía preocupación. Vecinos y ayuntamientos se prepararon para la llegada de las nuevas lluvias. La Confederación Hidrográfica del Segura retiró las cañas en el Reguerón, en el límite con Murcia. En Orihuela se limpiaron imbornales y el barro aún acumulado en el alcantarillado. La lluvia dejó balsas de agua en las calles.
La Policía Local se reforzó con dos patrullas más. Algunos vecinos colocaron sacos y ladrillos en las puertas, incluso en la iglesia del Carmen en Orihuela. Carreteras amplió las mallas de protección de los taludes de la N-340, aunque esta vez no fueron lluvias destructivas. En Alicante se cayó un árbol encima de un vehículo en la calle Anguila con Costablanca sin heridos y se desprendió parte de una cornisa en la calle Aldebarán. Los barrancos de Agua Amarga y del Juncaret, en cambio, siguen llenos de maleza y no se han limpiado ni con el aviso de gota fría.
