Tres sanciones en los últimos tres meses por incumplimiento de contrato a UTE Alicante, la concesionaria del contrato de limpieza viaria y recogida de residuos. La nueva multa, correspondiente al servicio prestado durante el pasado mes de septiembre, asciende hasta los 25.000 euros, según confirmaron ayer fuentes municipales. Esta sanción económica, una aminoración respecto a la última certificación mensual, se suma a los expedientes que se abrieron por la ejecución del pliego relativos a julio y agosto, que superaron en total los 125.000 euros. Estas dos sanciones fueron, según el gobierno de derechas, las más cuantiosa que recibiría la concesionaria en los últimos cuatro años, en referencia a la llegada al poder del tripartito de izquierdas en 2015.
Así, el gobierno dirigido por Luis Barcala (PP) ha promovido tres sanciones a la UTE formada por FCC, Ferrovial y dos empresas de Enrique Ortiz que rondan en conjunto los 150.000 euros en los últimos tres meses, coincidiendo con la reestructuración realizada en la Concejalía de Limpieza, que cambió a su máximo responsable técnico (ahora está al frente Manuel Marco) y al funcionario supervisor del contrato (Sebastián Chicote) al comienzo de este mandato. Estas multas en los últimos tres meses se restan por separado de la certificación mensual de julio, agosto y septiembre a una UTE que recibe unos 36 millones al año por el contrato de limpieza y recogida de basura en Alicante.
La aminoración relativa al reciente mes de septiembre responde a un incumplimiento del contrato por la «falta de ejecución de trabajos de desbroce en los caminos rurales y por el control de calidad», según admiten fuentes municipales, que a su vez se muestran optimistas por la actitud mostrada por la concesionaria tras las sanciones. Es decir, señalan que los trabajos en los caminos rurales están mejorando. Los motivos de la última sanción son los mismos que propiciaron las multas a la UTE en julio y agosto, que en ese caso sumaron 125.000 euros.
Con el objetivo de mejorar la limpieza en la ciudad, uno de los asuntos más criticados por ciudadanos y oposición, Barcala anunció también el refuerzo de inspectores, que se concretó este mes de octubre con un aumento de la plantilla. El Ayuntamiento dio hace tres semanas por completada, al menos por el momento, la remodelación de la Concejalía de Limpieza con la contratación de cuatro nuevos inspectores y de cinco policías locales. Los primeros se dedicarán a la tarea específica de velar por el control de la calidad del servicio por parte de las empresas concesionarias integradas en la UTE Alicante, y los agentes de las conductas incívicas que violen la ordenanza de Limpieza y Residuos. Según fuentes municipales, la plantilla de inspectores se queda en trece tras las nuevas incorporaciones.
En respuesta
El concejal de Limpieza, el popular Manuel Villar, explicó tras el aumento de los inspectores que se había impulsado un cambio técnico de la concejalía con el objetivo de mejorar el control del contrato y del cumplimiento de la ordenanza. Esto se sustancia, afirmaron fuentes municipales, en la incorporación de los técnicos encargados de la supervisión del contrato y en la preparación de nuevos pliegos ante la finalización del mismo en septiembre de 2021.
Villar recordó a principios de este mes que se había también licitado la auditoría económica de la contrata con la supervisión del departamento de Intervención, y que se había reforzado la inspección para hacer el control de calidad. Además incidió en la contratación interina de cuatro nuevos inspectores, y de los cinco agentes, y del impulso de «la asistencia externa de un equipo multidisciplinar para hacer toda la nueva planificación en materia de recogida y gestión de residuos» con la redacción del nuevo Plan de Residuos de Alicante. «Estamos dando todos los pasos para conseguir una gestión lo más óptima posible del contrato actual, tanto en la calidad de la prestación del servicio como en su control económico, así como en la vigilancia de las conductas incívicas que deterioran dicha prestación y perjudican la imagen de la ciudad», reiteró el concejal de Limpieza tras anunciar recientemente el refuerzo de la inspección y tras conocerse las dos primeras sanciones a la UTE responsable del servicio.
Estas decisiones técnicas suponen en la práctica un refuerzo del control sobre la concesionaria y llegan en respuesta al aluvión de críticas ciudadanas, a las que se han sumado también los partidos de la oposición y entidades como la patronal hotelera, por la situación de la limpieza en Alicante.
