Pagar la matrícula universitaria en ocho plazos, el doble del tiempo disponible en la actualidad que es de cuatro meses, es la demanda que los estudiantes han trasladado formalmente al Rectorado de la Universidad de Alicante, ante las dificultades económicas que implica el desembolso de los 2.300 euros que supone cursar la mayoría de los másteres.
Los más económicos son aquellos obligatorios para ejercer las carreras de Derecho o de Magisterio, 897 euros, o los de Arquitectura, Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos, Ingeniería Geológica, Ingeniería Química, Ingeniería de Telecomunicación o Ingeniería Informática, que cuestan 1.200 euros.
Joaquín Pérez se apuntó a un master de Investigación criminal y Ciencias forenses pero ni lo ha empezado. El precio le da vértigo aunque reconoce que se lo podría permitir. No obstante ha preferido optar por trabajar hasta enero y prepararse las oposiciones de Correos, además de las de Guardia Civil para cuando salgan. «Estoy a favor de que se amplíen los plazos para pagar la matrícula, porque en mi caso me salía a 660 euros en cuatro plazos (2.400 euros en total), y reducirlo a 300 euros ayuda mucho. Compañeros míos dejaron incluso la carrera de Historia porque no se la podían pagar y es de las más económicas», explica. Son poco más de 55 euros ahora, tras las sucesivas rebajas en las tasas que el Consell ha aplicado los dos últimos años y que han supuesto disminuir el precio de carreras y másteres un 15%.
El coordinador de la asociación de universitarios SAÒ en Alicante, Fran García, ha trasladado la petición al vicerrectorado de Estudiantes «para aliviar las economías domésticas haciendo más flexible el pago de las tasas».
A Iván Mañús, estudiante de Ingeniería Informática, aplazar más los pagos le permitiría terminar la carrera en menos tiempo. De momento se ve obligado a compaginarla con un trabajo a media jornada para poder pagar las tasas universitarias que este curso le suponen 608,10 euros. «No he cogido nada más que la mitad de las asignaturas, así lo puedo pagar y compaginarlo con el trabajo porque vivo con mi madre, que está en el paro, y he tenido que desembolsar un dinero por serios problemas con el coche a consecuencia de la riada en la Vega Baja», explica.
Abunda Iván que el precio que tienen que pagar por solo la mitad de las asignaturas de este curso es además el más económico, el de primera matrícula. Si se suspende, en la denominada segunda matrícula el coste se incrementa un 89%, en tercera matrícula hasta un 300% y en cuarta, que sería la cuarta oportunidad de superar una asignatura, se paga un 435% más. «Soy buen estudiante y he tenido beca del Ministerio aunque solo llega a 60 euros, pero los que no pueden aprobar por tener que trabajar a un tiempo lo tienen muy complicado», lamenta.
La vicerrectora de Estudiantes, Nuria Grané, afirma a preguntas de este diario que la solicitud de los estudiantes se está valorando «y se va a estudiar de cara al curso que viene», aunque también recalca que la gestión de ampliar el pago de las tasas cada mes «duplicaría la carga actual, aunque considero que no hay nada imposible y se puede estudiar», sopesa. Ahora se paga en cuatro veces.
Afectados por la gota fría pueden pedir demoras
En el vicerrectorado de Estudiantes de Alicante aseguran que para aquellos alumnos que demuestran documentalmente dificultades económicas o que se encuentran en una situación vulnerable, los aplazamientos de pago pueden prolongarse «incluso durante once meses». Nuria Grané precisa que cualquier circunstancia especial «se atiende» como es el caso de los alumnos afectados por la reciente gota fría. Basta, concluye, con que lo acrediten.
