Un hombre ha sido sacado en torno a las 9.30 de la mañana del agua, en la zona de los espigones del edificio Rocafel. Se trata de un hombre que se había metido en el mar para nadar y tenía dificultades para salir.

Según relatan varios testigos, una vecina ha dado la alerta tras ver a un hombre en el mar, que en ese momento estaba muy agitado por el temporal, y que tenía dificultades. Hasta la zona se han desplazado varias dotaciones de bomberos, incluidos dos camiones con escaleras, Policía Nacional, Policía Local y miembros de Protección Civil.

El primero en llegar ha sido un vehículo con varios bomberos equipados con trajes de neopreno, que se han lanzado al mar y han llegado hasta donde estaba el hombre, muy cerca de las rocas de los espigones. Tras hablar unos instantes con él, le han acompañado hasta una zona donde hacía pie y a partir de ahí ha salido él solo caminando hasta la orilla. El hombre iba en bañador y no ha requerido asistencia sanitaria.