Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los dos temporales de este año causan daños en viviendas y vehículos por 16 millones

Los ayuntamientos de la provincia movilizan a los cuerpos de seguridad, reparten sacos y preparan vallas para cerrar caminos inundables ante la alerta naranja por gota fría hasta las nueve de esta noche

El barranco de Aguamarga en Alicante, con la vegetación muy crecida, que puede obstaculizar la salida de la riada al mar si hay gota fría. Pilar Cortés

La amenaza de un nuevo episodio de lluvias fuertes, que pueden estar acompañadas de granizo, se cierne durante todo el día de hoy sobre la provincia, en alerta naranja por riesgo de gota fría justo una semana después del temporal del 20 de agosto. Las dos trombas de agua que han caído este año, la primera en Semana Santa y la segunda el martes pasado, han causado daños en viviendas y vehículos por, al menos, 16 millones de euros, una cifra que no está cerrada porque los partes de reclamación al seguro del episodio de lluvias torrenciales de hace tan solo ocho días pueden aumentar.

El Consorcio de Compensación de Seguros, dependiente del Ministerio de Economía, cifró el coste de las inundaciones de Semana Santa en la provincia en 11 millones de euros, de los que se han pagado el 92,%, es decir 8,8 millones de euros. Por aquellas lluvias tramitaron 3.643 reclamaciones de indemnización. En cuanto al temporal de hace una semana, se han recibido más de 400 partes, aunque se espera que esta cifra se multiplique por cuatro. Se estima que el coste aproximado para las aseguradoras será de 4,5 millones.

El Consorcio confeccionó un equipo de 24 peritos que recorrió las zonas afectadas por la tromba del 20 de agosto en las primeras horas para valorar los daños, según su director de Operaciones, Alejandro Izuzquiza. De los partes recibidos, más de 300 corresponden a daños en viviendas, comunidades de propietarios y automóviles; y el resto a oficinas y comercios.

La mayoría de las reclamaciones son por destrozos en Alicante, Santa Pola, El Campello y Sant Joan. No se contabilizan los daños en playas, que en la provincia no suelen estar aseguradas, por lo que su reparación va por otros cauces. Las reclamaciones pueden aumentar si se cumple la alerta naranja por gota fría decretada desde la pasada medianoche y hasta las 21 horas de hoy. La Agencia Estatal de Meteorología evalúa entre un 40 y un 70% la posibilidad de que Alicante y los litorales norte y sur de la provincia contabilicen precipitaciones acumuladas en una hora de 40 litros por metro cuadrado.

Los ayuntamientos de las principales ciudades de la provincia han movilizado a los cuerpos de Bomberos, Policía Local, Protección Civil y brigadas de limpieza y mantenimiento para que estén preparados para intervenir.

En el caso de Alicante, el depósito de Aguas en San Gabriel, con una capacidad para almacenar 60.000 metros cúbicos de agua y que se llenó con la tromba de la semana pasada, está ya vacío y preparado para recibir una nueva entrada de lluvia. En cuanto al parque de La Marjal, en la Playa de San Juan, que puede recoger hasta 45.000 metros cúbicos de agua, está con su lámina de agua habitual, también listo para recibir más caudal. Preocupa en el Ayuntamiento la cota de la Playa de San Juan por debajo del nivel del mar, donde se inundaron garajes y negocios la semana pasada, al resultar insuficientes los aliviaderos.

Elche ha preparado vallas para cerrar los caminos inundables. Dos equipos de Protección Civil están preparados por si tuvieran que intervenir por la lluvia y se han suspendido las actividades deportivas y los mercadillos al aire libre. Las brigadas de mantenimiento están activadas por si tuvieran que hacer uso de la maquinaria pesada. Se ha pedido a la población que evite pasar por cauces de ríos, barrancos y zonas inundables.

La Policía Local de Sax supervisó ayer la descarga de dos palés con sacos de arena en la avenida de Reyes Católicos y de otro tanto en Jaime I para que los vecinos puedan colocarlos en el acceso a sus viviendas, garajes, bares y comercios de forma preventiva ante el riesgo de lluvias torrenciales. Estos dos viales forman parte de la travesía de Sax y carecen de colector de pluviales, por lo que el agua de lluvia se recoge en la conducción de residuales y cuando llueve mucho se colapsa la canalización y el agua sucia inunda los bajos, como ocurrió la semana pasada.

Alcoy también tiene avisados a sus servicios municipales y se han limpiado los imbornales del alcantarillado para que no haya atascos.

Compartir el artículo

stats