P ¿Todo el mundo puede dejarse barba o no siempre queda bien?
R A todo el que le salga se la puede dejar. La barba ayuda a moldear la forma de la cara y a mucha gente le queda bien. Gracias a ella puedes conseguir el efecto de alargar o redondear las facciones. A mí personalmente me gusta más como le queda a los hombres con la cara redonda o alargada y me gusta más que quienes tienen las facciones muy marcadas se afeiten.
P Hace unos años la barba vivió un «boom» gracias a los hipsters, ¿sigue tan de moda?
R Sí, sigue muy de moda pero lo que ya no se lleva es llevarla tan larga. Ahora la gente se la arregla con más frecuencia y la prefieren de menor longitud.
P Muchos hombres aprovechan el verano para dejársela ¿no es contradictorio con el calor?
R Es verdad que muchos aprovechan las vacaciones para darse un descanso del afeitado diario pero con la idea de volver a afeitarse al regresar al trabajo. Da calor, pero para presumir hay que sufrir.
P Uno de ellos ha sido el líder del PP
R Sí. Pablo Casado está bien sin barba, pero es verdad que no le queda nada mal. No sé por qué me da la sensación de que su barba es temporal, pero a lo mejor decide dejársela si ve que tiene aceptación.
P ¿Existe una edad a partir de la cual quede mejor?
R Es curioso porque hay bastantes jóvenes que se la dejan para parecer mayores porque tienen un cargo de responsabilidad en el trabajo y quieren que los tomen en serio, infundir respeto. Es cierto que a los que son más jóvenes les hace parecer mayores, sobre todo si tienen canas.
P ¿A quién le afeitaría la barba, en sentido figurado?
R Ahí no me quiero meter... pero bueno, a más de un político que no termina de ponerse de acuerdo. Aunque bueno no sé si sería afeitar barbas o cortar coletas.
P En esto de la barba también habrá modas, ¿quién marca tendencia?
R Como ahora tenemos fotos de todo es cierto que me enseñan muchas barbas de futbolistas para tenerla parecida. Ahí asesoramos, porque no a todo el mundo le queda igual de bien una que otra. Y a raíz de un reto viral contra el cáncer también se está poniendo de moda otra vez el bigote. Ni largo ni abundante, como de un mes.