P En agosto deben estar a tope de trabajo, ¿cuántas maletas puede precintar en un día?
R Pues no sabría decirlo porque depende mucho del turno en el que se trabaje, pero, vamos, más de cien seguro.
P ¿Quiénes son los principales clientes?
R Sobre todo los rusos y también los sudamericanos que van a su país vía Madrid. También los árabes.
P ¿Los españoles no?
R Mucho menos que los extranjeros, aunque también son numerosos. Cuando se trata de españoles viene gente de más edad y para viajes largos, para vuelos nacionales se precinta muy poco.
P ¿Cuál es el principal motivo, para proteger la maleta o para evitar que alguien les introduzca algo al descuido?
R En general los rusos lo piden para proteger. Por un lado han gastado mucho dinero en compras aquí y por otro llevan maletas que cuestan a lo mejor mil, dos mil euros o más y, claro, si no las protegen llegan a su destino destrozadas. Los que viajan a Sudámerica lo piden más para evitar que les puedan meter droga sin enterarse.
P Con tantos años de experiencia debe tener mil anécdotas, ¿qué es lo más raro que le han pedido?
R Una vez me trajeron una urna con las cenizas de un familiar para precintarla. Les advertí de que la máquina está diseñada para maletas y que no respondía si se rompía. Pero se empeñaron, me pidieron que tuviera cuidado y la precinté. Al final fue una situación cómica porque una vez precintada se quedó enganchada y me costó sacarla. Nos traen de todo, también he precintado espadas.
P Veo que también se venden fundas de tela.
R Para las personas que viajan mucho es muy cómodo y les resulta más rentable tener una funda que precintar la maleta por diez euros cada vez que vienen al aeropuerto. Además, es mejor para el medio ambiente, menos plástico que se utiliza.
P ¿Qué otros servicios presta?
R Tenemos una pequeña consigna para equipajes. Hay quien va a viajar y lleva algo que no le dejan embarcar en el avión. Viene y lo guarda aquí hasta su vuelta. Y también utilizan la consigna turistas que llegan y sólo tienen un día para visitar la ciudad. Por otra parte, tienen mucho éxito los transportines para animales. Algunos llevan a los animales embutidos y en el control de equipajes les paran. Se perdían muchos vuelos por las mascotas.
