Lejos quedan ya aquellas agrias polémicas en tiempos del tripartito con Pavón y Echávarri como protagonistas a cuenta de la ordenanza de veladores. Aunque el debate no está a la orden del día, la disparidad de opiniones entre hosteleros y vecinos sobre la ocupación de la vía pública de terrazas, y las molestias que ocasionan, continúa latente. El Ayuntamiento de Alicante no tiene prevista una ampliación del espacio acotado en las calles para los veladores de los negocios, especialmente en las zonas más masificadas del centro de la ciudad.
Según ha confirmado el nuevo concejal de Ocupación de Vía Pública, Manuel Jiménez (PP), los contactos para acercar las posturas entre aquellos que velan por el descanso y por los que apuestan por la presencia de negocios ya han comenzado. Sin embargo, el gobierno local ha marcado una postura clara al respecto y descartar una ampliación de veladores, especialmente en las zonas más saturadas de la calle Castaños y alrededores. Detalla Jiménez que se atenderán las solicitudes de licencias para aquellos que cumplan con la normativa pero advierte de resultará complicado que «aquellos locales que busquen un mayor espacio puedan tenerlo». Considera que «las terrazas están bien como están y no se podrán ampliar donde no haya espacio».
Asimismo, el edil afirma que también se centrará en el control del ruido a través de los medidores, pero que «está siendo un verano bastante tranquilo». Coincide así el político con los comerciantes y hosteleros, aunque ambos siguen solicitando al Ayuntamiento que tome cartas en el asunto para conseguir un equilibrio para ambos. Para ello, el concejal pretende poner «encima de la mesa» la polémica surgida estos últimos años y buscar una solución a través del «diálogo y consenso». «Tenemos que tener en cuenta lo que solicitan los vecinos que es el derecho al descanso, pero, por otro lado, no podemos obviar que la hostelería, y en concreto los veladores, suponen un motor económico importan para la ciudad y tenemos que buscar una solución intermedia». Jiménez reconoce también «el colapso municipal» que había cuando asumió el cargo hace casi dos meses, debido al número de licencias sin otorgar que esperaban en el despacho, algo que también ha reconocido la Asociación Provincia de Empresarios de Hostelería (Apeha). «Tenemos que ofrecer un servicio más ágil para los ciudadanos y estamos trabajando para que no haya más retrasos en la concesión de licencias de apertura».
Y es que la queja principal del sector hostelero a nivel provincial es que se llegaron a acumular más de 40 expedientes en la concejalía, un situación que ya se ha solventado, pero que causó que algunos negocios de la playa y de Vistahermosa no pudieran disponer de terrazas este verano. Desde APEHA, su secretaria Emilia Ortiz, señalan directamente a las juntas de distrito, puesto que los informes son fundamentales para que los técnicos concedan las licencias de aperturas. La asociación sostiene que este requisito, impulsado por el tripartito sobre la ordenanza en 2015, ha generado ese colapso administrativo que afectó a más de 40 negocios, puesto que las juntas no se han reunido en los últimos meses, tal y como apuntan los hosteleros.
Comerciantes y restauradores coinciden en que «está siendo un verano tranquilo» y piden al Ayuntamiento que agilice un encuentro con los actores implicados para que no haya más conflictos con los veladores, que insisten en que la culpa es de los responsables municipales porque «no hacen cumplir la ley».
