Montañas de algas se han depositado en los últimos días en la orilla de la playa de San Juan a consecuencia de los dos temporales seguidos que han azotado el litoral alicantino, dejando toneladas de posidonia arrancada de los fondos marinos a lo largo de toda la costa. Aunque el problema está afectando a las diferentes playas, en San Juan está costando más la recogida que el Ayuntamiento ha intensificado por la gran extensión del arenal.
En la zona de los restaurantes Casa Julio y Casa Domingo y en otras zonas de esta parte del litoral ayer continuaban los montones que días atrás se acumulaban en buena parte de la playa, y que van a menos por la recogida nocturna. El sábado «daba asco bañarse», dijo una usuaria y el domingo había grandes manchas tanto en el agua como en la arena de la orilla. Los bañistas esquivaban los restos de posidonia, con quejas por la suciedad en el mar y grupos de personas concentrándose allí donde el agua estaba más limpia, bañándose por «tramos».
«Primero había 'pelotitas' pero ahora están saliendo las algas que se quedaron en la zona de baño», abundaron los presentes. Algunos han optado por no entrar al agua desde que empezaron a acumularse las algas. Los montones no son exclusivos de la playa de San Juan porque son aún de mayor tamaño en Muchavista, ya en término de El Campello.
Los malos olores y los mosquitos provocaban quejas de algunas personas que evitaban los montones, buscando la arena y el agua limpias. Sin embargo, el director del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante, Jorge Olcina, recordó que tal cantidad de algas significa que el Mediterráneo está en muy buenas condiciones. «La gente se queja porque ve las algas como una molestia pero indican la buena calidad y salubridad de las aguas del mar. Si no hubiera pradera de posidonia, estaría muerta y significaría una mala calidad del agua».
El meteorólogo explicó que la causa de esta gran presencia de algas en la orilla de las playas alicantinas en las dos últimas semanas se debe a que ha habido dos temporales de Levante seguidos, «que arrancan la posidonia y la arrastran hasta la orilla. Por eso hay tantos bancos de algas».
«Entra dentro de lo normal. Es frágil y cuando hay oleaje de este tipo, arranca la pradera marina y se muere. Se descompone y algunos días huele un poco mal y hay mosquitos. Entonces enseguida la gente se queja pero es el ciclo normal del Mediterráneo». A corto plazo no se esperan más temporales de Levante, por el contrario hoy y mañana soplará algo de Poniente, lo que elevará también las temperaturas.
El director del Laboratorio de Climatología recordó que hasta que las algas no se sequen no se pueden retirar. «Las quitan porque es verano y se queja el turismo. En invierno conviene mantenerlas. Es el mejor protector de la erosión de las playas y de la pérdida de arena». Hay municipios de la provincia que dejan durante muchos meses que se vayan acumulando en las orillas.
Otro problema en la playa de San Juan este verano del que dan cuenta los bañistas es que el balizamiento de los canales de patines es mínimo y que éstos enseguida se meten en zona de baño. «Además quedan cuerdas de balizas antiguas medio enterradas en la arena de años anteriores, en las que te enganchas continuamente, sobre todo llegando a la orilla. Se lo hemos dicho a los socorristas y lo hemos comunicado a Costas». Las pasarelas y lavapiés ocultos en ocasiones por la gran cantidad de arena son otras cuestiones que este verano preocupan a los asiduos al arenal alicantino.
Limpieza especial hasta que se retire toda la posidonia
Los operarios de limpieza han retirado desde el jueves toneladas de algas que el mar ha sacado a las playas de San Juan, Albufereta, Almadraba, Postiguet, y Saladar, Urbanova. El concejal de Limpieza, Manuel Villar, afirma que el dispositivo de limpieza y recogida de algas va a continuar hasta que se logre su total retirada. Los operarios se ayudan de palas excavadora y camiones de gran capacidad, y rastrillado de la arena. Así lo explica el Ayuntamiento, que mantendrá el refuerzo. «La retirada de algas se realiza diariamente durante todo el verano, y se intensifica cuando hay temporal. Solo pueden ser recogidas una vez depositadas en la arena ante la imposibilidad de actuar sobre las que están flotando en el agua». Dado que el mar no para de arrojar algas a la playa, acumulándose en las orillas, se prolongarán las tareas.
