La consellera de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática, Rosa Pérez Garijo (de Esquerra Unida), aseguró ayer que no se podrá actuar en las fosas comunes de la Guerra Civil del cementerio de Alicante de la misma manera que se actuará en las de Paterna (València), dada la dificultad que supone que en ese lugar se haya enterrado con posterioridad a personas no fallecidas en la contienda. Garijo precisó que en Alicante se fusiló a 724 personas, pero las fosas son «muy grandes» y, además, de esas personas hay ciudadanos que fallecieron por otras cuestiones después de la Guerra Civil. «Nuestro objetivo es exhumar las fosas, pero si no tienen las condiciones para ello, y así lo dicen quienes están trabajando, lo que vamos a hacer es trabajar junto a las asociaciones», aseveró tras reunirse con Comisión Cívica de Alicante por la Recuperación de la Memoria Histórica. En ese sentido, la titular de Calidad Democrática asumió la reivindicación para levantar en el cementerio alicantino un mausoleo: «Vamos a trabajar junto a los familiares y a las asociaciones que han tenido una reivindicación durante muchos años».

Por su parte, desde la Comisión Cívica de Alicante, Vicente Carrasco lamentó que la Memoria Histórica haya perdido «fuelle e interés» para el nuevo Gobierno municipal de PP y Cs, al no contar con concejalía específica. No obstante, remarcó que no van a perder el «aliento» y que van a seguir en «la dinámica de trabajo, de recuperación de la memoria y de exigencia de justicia, de la verdad y de la reparación hasta donde sea posible». Así, anunció ayer que solicitarán una entrevista con el alcalde, Luis Barcala, para abordar lo que queda por hacer en la ciudad y que ha identificado en la comisión de calles «y cuestiones pendientes como un memorial en el puerto que homenajee a los republicanos». También puso sobre la mesa, por otro lado, la posibilidad de crear itinerarios urbanos, la recuperación de los refugios o la visibilización de los vestigios en la ciudad de Alicante.