El Consejo de Administración de Adif aprobó ayer el documento que marca el punto de salida para que las empresas privadas interesadas en competir con Renfe en el AVE entre Alicante y Madrid presenten sus ofertas. La fecha tope es el 31 de octubre y la intención del Ministerio de Fomento es que los trenes comiencen a circular el 16 de diciembre de 2020. Adif ha elaborado una oferta concesión de diez años agrupada en tres paquetes -A, B y C-, en función del número de circulaciones por día, para los corredores Madrid-Barcelona-Frontera francesa y Valencia-Barcelona, Madrid-Levante (València y Alicante) y Madrid-Toledo-Sevilla-Málaga.
Las empresas interesadas tienen hasta el 31 de octubre para comunicar sus ofertas a Adif, que prevé seleccionar a los futuros competidores de Renfe antes del 14 de diciembre de este año, un año antes de que comiencen a operar el servicio ferroviario. Entre las empresas aspirantes figuran la francesa SNCF, Acciona, las alemanas Deutsche Bahn y Flixbus, Globalia, Alsa, o Virgin. En concreto, el corredor Madrid-Alicante-València entra en el lote B en el que partir de diciembre de 2020 habrá 53 circulaciones diarias por las 37 actuales, con lo que la oferta de AVE aumentará un 40%, lo que en el caso de Alicante puede traducirse en seis AVE diarios más en cada sentido, ya que la plataforma actual de vía solo se utiliza al 35% su capacidad real.
A partir del año 2022 el corredor se abrirá también a la plena competencia y cualquier operador podrá prestar servicios en las líneas entre Madrid, Cuenca, Albacete, Alicante, València, Castellón y Murcia en redes de alta velocidad y convencionales, tanto en vía doble como única.
Según el Ministerio, el objetivo de este proceso es dotar al mercado de mayor oferta de servicios y disponer de precios más competitivos, gracias a la mayor competencia.
Fomento otorgará un único «título habilitante» mediante un procedimiento público de licitación, que garantice la competencia de los operadores que concurran, y el adjudicatario podrá decidir libremente las conexiones sobre las que va a establecer servicios, dentro del ámbito del citado corredor. Asimismo, el nuevo operador podrá fijar las frecuencias de sus servicios y sus precios.
Pasajeros
La línea Madrid-Valencia registra 6,5 millones de pasajeros al año, de los cuales 1,78 millones son del tren, 264.000 del avión, 3,9 millones en coches particulares y 580.000 viajeros se mueven en autobús. La cuota de mercado del ferrocarril es del 27,4%. En el caso de Alicante, desde la inauguración del corredor de alta velocidad a Madrid el 18 de junio de 2013, el número de viajeros ha crecido de forma constante hasta alcanzar una ocupación media del 85%. La demanda en tren en la citada relación ha crecido más de un 50%, desde el primes mes de funcionamiento. El AVE, con paradas intermedias en Villena, Albacete y Cuenca, ha superado en determinados días los 6.000 viajeros y en total la línea ya ha superado los 2 millones de usuarios al año con 22 trenes al día.
Y tras la privatización parcial en 2020, Fomento prevé que en la primavera de 2021 pueda circular ya el bautizado como «EVA», o AVE «low cost». De esta forma, el viaje entre Alicante y Madrid se abaratará entre un 30% y 50% sobre las tarifas actuales en unos trenes que también serán diferentes, porque tendrán más plazas y suprimirán el vagón cafetería.
En principio, Fomento quiere que Renfe (empresa pública) sea la primera en estar preparada para dar el servicio porque la puesta en marcha de estos trenes coincidirá, además, con la liberalización del transporte ferroviario en Europa, que permitirá que empresas privadas o de otros estados de la UE puedan operar en España, tanto en la línea Alicante-Madrid como los corredores entre Madrid, València, Sevilla y Barcelona. De hecho, Renfe recibirá ya el próximo año un lote de 40 trenes AVE fabricados por Talgo. La previsión es que pese a la liberalización del tráfico ferroviario en Europa en diciembre de 2020, Renfe siga concentrando el 80% de la actividad.
La alta velocidad ha supuesto una revolución a la hora de viajar entre Alicante y Madrid. En 2013, el tren absorbía el 77% del mercado por un 23% del avión. Hoy, el tren supone el 81,4% del mercado, y el avión un 19% del que casi el cien por cien es de viajeros en conexión con otros destinos.
