Los Moros y Cristianos de San Blas se quedan sin disparos en los dos alardos que tendrán lugar el lunes por la mala calidad de la pólvora suministrada por la única empresa autorizada por el Ministerio de Industria para comercializarla. El explosivo importado tiene una granulometría excesiva que, según la Guardia Civil, haría peligrosa su utilización.

La noticia, conocida hoy mismo, cae como un jarro de agua fría entre los festeros del barrio alicantino, quienes se muestran, ya iniciada la entrada del bando cristiano, consternados por no poder dar continuidad a una tradición que lleva sin saltarse 76 años. En los actos del lunes, tanto en la emabajada mora con batalla y capitulación cristiana como en la embajada cristiana con batalla y capitulación mora, no habrá pólvora negra para arcabucería.

Los últimos acontecimientos ocurridos con la distribución del explosivo para arcabucería, que ayer ya habían obligado a suspender distintos actos a algunos municipios de la provincia, llegan ahora también a Alicante. El problema, que tiene que ver con una granulometría de pólvora mayor de lo aconsejado y que da problemas a la hora de realizar la correcta carga del arma, restará parte de la esencia que guardan los alardos en esta fiesta.