Los colegios públicos en los que Educación ha ido abriendo aulas para niños de 2 a 3 años perderán parte de los profesionales con que estaban dotadas a partir del curso que viene.
La medida se incluye como una disposición transitoria en el conjunto de la normativa que regula el funcionamiento de las escuelas públicas de primer ciclo de Infantil, para niños de 0 a 3 años, para el curso que viene, al que pertenecen las aulas de 2 años al quedar englobada esta etapa en la enseñanza de 0 a 3 años oficialmente, dejando de ser experimental como desde que se crearon con el Consell del Botànic.
La transitoria de la normativa que desde el sindicato de CC OO ya han recurrido por la vía judicial, contempla que las aulas de niños de 2 a 3 años ubicadas en colegios públicos, «serán dotadas con un único educador o educadora de Educación Infantil por centro», independientemente, por tanto, del número de aulas y alumnos escolarizados.
Atendiendo a las citadas necesidades de escolarización, en algunos de los colegios Educación sumó dos aulas para niños de dos años e inicialmente cada una de ellas estaba dotada con su correspondiente maestro y un educador.
Contando las nueve aulas más de este tipo que se han anunciado en la provincia de Alicante para el curso que viene, en conjunto habrá en colegios públicos 249 aulas gratuitas de 2 años con un total de 4.862 plazas, pero los que tienen dos de estas unidades verán reducido el personal de que disponen.
Hasta ahora eran los colegios los que solicitaban estas aulas piloto y la conselleria decidía si las autorizaba o no. Como programa experimental se lanzó para reducir el fracaso educativo en ESO, a tenor de los estudios internacionales que inciden en los beneficios de la escolarización temprana, y para mejorar la conciliación familiar.
Esta oferta gratuita también ha servido para atraer alumnado a los centros públicos en los que se ha aumentando la matrícula de aquellos colegios menos demandados, y que por lo mismo tienen aulas vacías para las nuevas unidades de niños de dos años.
Oposición
Pese a defender estas aulas, el sindicato de enseñanza de CC OO advierte que se opone frontalmente a la nueva distribución de los puestos de trabajo y espera que los tribunales le den la razón como también sucedió recientemente sobre los derechos de los educadores de Infantil a no ser considerados monitores de comedor.
«La orden de Educación supone la supresión de puestos de trabajo y de tapadillo, con el curso acabado, sin consultar a la comunidad educativa y sin negociación previa», subraya la delegada de Infantil en CC OO, Mada Maciá. El sindicato ha presentado un contencioso-administrativo y valora que ratios de 18 alumnos requieren de dos profesionales.
