Este verano, habrá vaquilla en El Moralet. Por segundo año consecutivo, coincidiendo con la última etapa del PP al frente del gobierno, los festejos taurinos en la partida alicantina se volverán a celebrar. La Junta de Gobierno, formada por concejales del PP y Cs, ha dado por cumplimentada la declaración favorable del Ayuntamiento para los festejos los días 22, 23, 24, 25, 29 30 y 31 de agosto, además del 1 de septiembre, de "conformidad con lo previsto en el Decreto del Consell por el que se aprueba el Reglamento de festejos taurinos tradicionales de la Comunidad Valenciana". El permiso municipal, eso sí, está condicionado al "estricto cumplimiento y obtención de todas las demás autorizaciones, permisos o requisitos que resulten exigibles conforme a la normativa vigente".

Esta decisión del gobierno municipal choca con la declaración institucional que aprobó el pleno de Alicante, en la sesión del pasado mes de noviembre de 2018. Esa propuesta, a iniciativa de Guanyar, iba dirigida a "desmantelar el recinto de la vaquilla". La declaración salió adelante con los votos a favor de los exmiembros del tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís), el voto en contra del PP y la abstención de Cs.

La formación naranja, entonces en la oposición y ahora en el gobierno, junto a los populares, ha decidido ahora mantener la vaquilla que volvió a celebrarse el pasado verano después de cuatro veranos. La partida alicantina de El Moralet recuperó hace ahora un año los bous al carrer, que se celebraron entre el 18 y el 26 de agosto, cuatro años después de los últimos festejos taurinos. En los últimos tres veranos, el tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís) habían vetado la vaquilla "por no ser una actividad de utilidad pública y por celebrarse en un suelo protegido como rambla".

El pasado año, Guanyar advirtió del riesgo de que se celebre el festejo taurino en una rambla en caso de lluvias fuertes. Este grupo registró un escrito dirigido a la Presidencia de la Generalitat alertando de las posibles irregularidades que pueden existir en la autorización del espectáculo taurino en terrenos de propiedad municipal calificados como Suelo No Urbanizable de Especial Protección de Rambla.

En este año, las críticas han llegado desde Podemos y Compromís. La formación morada ha mostrado su disconformidad con la decisión de la Junta de Gobierno municipal formada por Partido Popular y Ciudadanos por la que se aprueba la declaración para la celebración de festejos de "bous al carrer" en la partida rural de El Moralet. Para el portavoz municipal de Podemos, Xavier López, el Ayuntamiento no puede ir en contra de las decisiones adoptadas en su Pleno, donde "se acordó el desmantelamiento de este recinto y de la edificación que está en la parte más baja de la parcela, acuerdo del que el bipartito PP-Ciudadanos hace caso omiso".

Por su parte, desde Compromís recuerdan que en julio del año pasado, cuando el "minigobierno del PP decidió autorizar el festejo después de tres años sin celebrarse", la asociación vecinal Nou Moralet presentó un recurso de reposición que todavía no ha tenido respuesta. Posteriormente, prosigue Compromís, se elevó por parte de la asociación una queja al Síndic de Greuges, "que en febrero finalmente recomendó al Ayuntamiento que conteste al recurso y ejecutase el acuerdo plenario mayoritario para derribar el recinto taurino ilegal".

"Hay que recordar que buena parte del vecindario sigue pidiendo, tal y como estaba previsto en presupuestos de 2018, el poder habilitar esta parcela como un parque público, un lugar de reunión al aire libre, del que carecen, y desmantelar una construcción ilegal para el uso de siete días al año por una parte muy específica de la población. Se cede suelo público a una actividad -continúa Compromís- que no responde en absoluto al interés general e ignorando el riesgo de inundación. Por estos motivos instamos al Ayuntamiento a no conceder la cesión de la parcela municipal, y a la Generalitat a no dar permiso a la actividad", ha destacado Bellido.