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Educación cambiará la selección de interinos para cubrir bajas de Valenciano

El secretario autonómico afirma que antes del inicio del curso acordará nuevas normas de la bolsa laboral que aseguren las sustituciones docentes

Opositores de Valenciano el primer día de las pruebas. pilar cortés

La Conselleria de Educación se ha propuesto evitar el caos y pérdidas de clase generados el curso pasado, especialmente en la asignatura de Valenciano en los institutos, a consecuencia de la masiva renuncia de los interinos en bolsa a pedir plazas durante el curso para prepararse las oposiciones.

El secretario autonómico y número dos de Educación, Miguel Soler, se mostró ayer dispuesto a cambiar el actual modelo de selección de los interinos en bolsa para cubrir bajas a lo largo del curso de modo que se asegure que el alumno no pierde clases.

«Abordaremos de inmediato el sistema de la desactivación de las bolsas -el derecho a renunciar a pedir plaza sin perder el puesto en la bolsa- para que los alumnos no estén sin profesor», concreta Soler a preguntas de este diario. «Esperamos llegar a un acuerdo con los representantes sindicales. Haremos lo que haga falta para tener los profesores», recalca.

La conselleria quiere contar con este nuevo sistema de sustituciones desde el primer día de clase, una vez que se hayan llevado a efecto las adjudicaciones de plazas en las últimas semanas de julio, tras las actuales oposiciones.

El varapalo que implica que ocho de cada diez opositores de la especialidad de Valenciano en Secundaria hayan suspendido estas pruebas, porque no han superado la primera fase, aclara el secretario autonómico que no resta en ningún caso plazas para docentes «porque si se han ofertado 300 y finalmente se quedaran 130 sin cubrir, se sumarán a la oferta prevista para las próximas oposiciones». Hasta entonces, continúa explicando, seguirán a disposición de los interinos de la especialidad.

La escabechina acaecida en las oposiciones de Valenciano, tal y como la califican desde el sindicato CSIF, no será analizada por los responsables de Educación hasta que no acabe todo el proceso de las oposiciones y se publiquen las listas a partir del día 15 de julio.

«Se analizarán los resultados tanto de esta especialidad como del resto, si es que hay alguna incidencia a analizar», aclara Soler, «pero jamás entramos a valorar si un tribunal u otro suspende poco o mucho. Se designan los presidentes y el resto se nombran por sorteo, y estos funcionarios de carrera valoran, puntúan y ponen las notas», subraya solicitando respeto para la labor de los tribunales.

Los delegados de CSIF en la provincia apuntan que desde la coordinadora de los tribunales de Valenciano han hecho saber que se han seguido los criterios de corrección preestablecidos, y que quizá el descalabro esta vez se deba a que los exámenes no los han leído los opositores como en la anterior convocatoria, sino los propios tribunales «y en cuanto se llega a las seis faltas de ortografía se suspende». CC OO añade por su parte que uno de cada tres tribunales de todas las especialidades (112 de 300 en la Comunidad) han resuelto a favor de las reclamaciones presentadas a las notas de la primera fase.

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