La Universidad de Alicante ha puesto en marcha una red de inversores para abrir tanto a las empresas privadas como a instituciones y entidades interesadas los mejores proyectos de investigación que surgen de los laboratorios del campus de la mano de los propios profesores.
Los responsables del parque científico de la UA se han propuesto aprovechar que en el plazo de poco más de un año estará disponible el edificio estrella de esta zona tecnológica, que se denominará de Creación de Empresas, diseñado por Vázquez Consuegra y que podrá albergar a un total de 150 empresas y sucursales.
Los responsables no quieren perder el tren que esta oportunidad ofrece de poner cuanto antes en manos de la sociedad la innovación más puntera.
La gerente del parque, Olga Francés, puntualiza que con el inicio de la construcción del nuevo edificio de empresas, se abre en esta zona una etapa de «crecimiento y consolidación, una vez que ya se han puesto los cimientos para la prestación de servicios a las empresas», como sucede con el edificio de Servicios Técnicos y de Investigación, en pleno funcionamiento ya para los grupos de investigadores que se han establecido en las naves incubadoras.
La visibilidad que ofrece el campus a estas empresas es una de las principales razones por las que se vinculan estos grupos de trabajo, creando sus propias spin off. «Los cimientos ya están bien asentados en prestación de servicios que vamos adecuando día a día, en función de las demandas que nos trasladan, e incluyendo nuevos programas para empresas de base tecnológica», explica Olga Francés.
Captación
En esta línea, Francés añade el nuevo propósito, recién iniciado, por impulsar la financiación a través de la creación de una red de inversores. «En realidad sigue la línea de nuestra labor de apoyo para buscar financiación tanto pública como privada, un servicio que prestábamos». Y para muestra un botón, porque Bioflytech ha captado ya una financiación nada desdeñable de más de 10 millones de euros.
La gerente señala que para sumar más, en colaboración con otras entidades de la provincia «vamos a generar una red inversora para canalizar esos proyectos potencialmente invertibles, y concentrar a los inversores poniendo mayor atención sobre los proyectos previamente filtrados por estas entidades para relanzarlos, y que su innovación llegue a la sociedad de forma más inmediata», subraya.
Esta red busca aglutinar masa crítica de los proyectos investigadores previamente filtrados, lo que aporta un marchamo de calidad. De esta forma se ponen en valor y se defienden ante los inversores, a los que también concentrarán para que pongan el foco de su financiación en las cuestiones de innovación.
El parque va a ofrecer a su vez otro tipo de servicios: programas de innovación abierta y de resolución de retos. «Los ponemos en marcha ahora mismo para endulzar el atractivo del área científica hacia las empresas de todo tipo».
El parque de la UA no ha querido encorsetarse en un solo sector empresarial. La única premisa para vincularse radica en que el objetivo del sector sea la innovación, proceda o no de la universidad, e incluso independientemente de su tamaño o ubicación.
La foto fija que a día de hoy ofrece el parque muestra, entre la veintena de firmas que se han instalado hasta el momento, la prevalencia de aquellas relacionadas con las nuevas tecnologías (TIC) y la comunicación, y del sector biotecnológico, que reúnen hasta el 40% de la innovación que se trabaja actualmente en el campus.
El resto de empresas están relacionadas con sectores tan diversos como los materiales, la energía, la química y del ámbito de la salud con tecnología integrada, dirigida a mejorar la calidad del envejecimiento.
Incluso existen proyectos cuya vinculación está prevista en breve con el parque y que, a pesar de que el nombre de la firma no tenga qué ver directamente con la innovación, su departamento de I+D «sí está plenamente vinculado a la digitalización» avanza Francés, como sucede con cualquier empresa de futuro, «y esa parte es la que vinculan al parque científico para que les apoyemos en esa labor».
Nueva imagen aprobada por la oficina de marcas y más espacios
Nueva imagen aprobada por la oficina de marcas y más espaciosAcercamiento, captación, comunicación y estreno de una nueva imagen corporativa que la Universidad presentará oficialmente en breve, son los próximos pasos del parque científico.
Desaparecen del logo actual los tonos naranjas y se estrena otro que tiende hacia los morados y azules, para el que ya se ha recibido la notificación correspondiente de su aprobación por la EUIPO. «La nueva imagen se corresponde con la nueva fase. Los cimientos se han asentado y avanzamos hacia el crecimiento y la consolidación», concreta la gerente, Olga Francés. La nueva imagen está a su vez aparejada con las infraestructuras, aunque no sea el foco del parque. Hay consecuencias urbanísticas con la ubicación de las empresas y su actividad y se han habilitado espacios mas colaborativos y abiertos, en la planta superior de la sede de las oficinas del parque, un espacio diáfano denominado InnoSpace.
