Con una inspección ocular de lo que era Novocar, el establecimiento de automoción en el que la viuda del expresidente de la CAM Vicente Sala fue asesinada de dos disparos en la cabeza el 9 de diciembre de 2016. De este modo se estrenará el tribunal popular que juzgará este crimen del que Miguel López, yerno de la víctima y responsable del local cuando se cometió, es el único acusado. Unos hechos por los que se enfrenta a una petición de 24 años y medio de prisión por asesinato y tenencia ilícita de armas.
La presidenta del tribunal, la magistrada Francisca Bru, ha acordado que ésta sea la primera actividad de los miembros del jurado incluso antes de escuchar el interrogatorio de López, que está previsto para el 15 de octubre. Será un día después del inicio de una vista que se desarrollará a lo largo de 18 jornadas y cuya entrega del objeto del veredicto (las cuestiones a las que tiene que responder el jurado y que serán la base de la sentencia) se ha fijado para el 7 de noviembre.
La visita a Novocar antes del inicio de las declaraciones la había solicitado el abogado Francisco Ruiz Marco, que ejerce la acusación particular en nombre del hijo mayor de María del Carmen Martínez. La magistrada ha instado a la Policía a sitúe el coche de la víctima en el lavadero, donde se encontraba cuando fue tiroteada, y ha fijado la inspección para las seis de la tarde, hora sobre la que viuda del expresidente de la caja llegó a las instalaciones aunque con unas condiciones lumínicas diferentes debido a las fechas.
Además del testimonio de López, por la sala de vistas desfilarán otras 89 personas: 56 en calidad de testigos y 33 como peritos, entre ellos varios agentes policiales y el ultra Luis Enrique (antes Emilio) Hellín. Se trata del perito informático que realizó un informe del móvil de la víctima a propuesta del abogado de López, el letrado Javier Sánchez-Vera, y a quien éste planteó sustituir en la vista oral alegando que se había jubilado, lo que para la presidenta del tribunal no supone impedimento legal para comparecer.
Entre los testigos se encuentran los cuatro hijos de la fallecida, varios de sus nietos, su hermana, otro de sus yernos, los trabajadores de Novocar y clientes del establecimiento que se encontraban allí el día del crimen.
El auto notificado ayer se ha dictado días después de que el Tribunal Superior ratificara que un jurado popular juzgue este caso rechazando que, en contra de los argumentos de la defensa, pudiera estar contaminado por la repercusión mediática del caso.
