El alcalde en funciones de Alicante, Luis Barcala, ha mantenido esta mañana reuniones con representantes de cuatro grupos municipales, a los que ha preguntado cuál será su postura de cara al pleno de constitución de la corporación municipal. A todo a ellos, Mario Ortolá (Vox), Natxo Bellido (Compromís), Xavier López (Podemos-EU) y el concejal socialista saliente de la corporación que finaliza el sábado, Carlos Giménez, que ha acudido en lugar de Francesc Sanguino, les ha pedido sus votos para que el alcalde de lista más votada cuente "con el mayor apoyo posible" de la corporación.

Ante esa pregunta, los representantes de cada partido han confirmado que no apoyarán al alcaldable del PP y se votarán a sí mismos en el pleno del sábado 15. Tan solo Mario Ortolá ha dejado abierta la posibilidad de respaldar a Barcala, algo que dependerá de "varias conversaciones que tenemos aún pendientes con el PP", según ha señalado el candidato de la formación ultra. Al acabar toda la ronda de contactos, el alcalde ha rechazado por completo que haya ofrecido a Vox entrar en el pacto de gobierno, ya que "desde la noche electoral solo he ofrecido esta opción a Ciudadanos".

Respecto a Ciudadanos, Barcala ha señalado que las conversaciones para cerrar el acuerdo de gobierno "van tal y como estaban previstas" y se reanudarán mañana, para poder alcanzar un pacto "de investidura y de gobierno" antes del pleno del sábado. De momento, el contacto entre populares y naranjas se ha dado hoy un respiro a petición de la candidata de Cs, Mari Carmen Sánchez (que ha alegado un problema personal), y será mañana jueves cuando vuelvan las reuniones entre ambas partes.

Y así hasta el sábado que «vereremos en la investidura qué sucede», ha afirmado Barcala, confiado al ser el partido más votado, por lo que si nadie consigue la mayoría de 15 votos, «parto con la ventaja de ser el más votado». En todo caso, el alcalde en funciones ni siquiera tiene garantizado, dos días antes del pleno, el apoyo de Ciudadanos, porque «si Cs se hubiera comprometido a votarme, ya habría acabado la negociación». Lo que hay en juego «es un pack, investidura y gobierno», ha añadido.

Quienes todavía quieren hablar con Cs son el Partido Socialista. Según su representante en esta ronda institucional, Carlos Giménez, el alcaldable Francesc Sanguino no ha podido acudir "por motivos de agenda" que no ha podido precisar. Giménez ha manifestado que los socialistas siguen sin descartar un pacto con Ciudadanos, aunque "todavía no hay prevista ninguna reunión" con la formación naranja.