j. h.
Cerrar ventanas y balcones en la línea de fachada sobre la zona de fuegos, y ausencia de personas de los miradores durante el disparo de las mascletàs. Éstas son las normas que dicta este año el Ayuntamiento para mayor seguridad de los vecinos de los edificios de la plaza, ésta vez sin aviso de sanción, tras la polvareda que se levantó en las Hogueras de 2018 cuando las Concejalías de Fiestas y Ocupación de Vía Pública empezaron a notificar a los propietarios titulares de las viviendas de la plaza y de Marvá, con fachada a la línea de fuego, la prohibición de que hubiera personas en miradores y ventanas durante los disparos, arriesgándose a sanciones de hasta 600 euros, que después no se pusieron.
En las fiestas de 2017, una veintena de policías fueron llamando casa por casa en la plaza de los Luceros para que los vecinos procedieran a cerrar todas las ventanas y balcones como medida de seguridad en la mascletà después de la explosión de dos cristaleras. También llamaron a los timbres los Bomberos después de que la Jefatura amenazara con suspender los disparos si no se cumplían esas normas.
El Ayuntamiento ha preparado un dispositivo de casi 60 efectivos entre bomberos, policías locales y voluntarios de Protección Civil para las 13 sesiones pirotécnicas. El primer disparo será este domingo a las 14 horas a cargo de Hermanos Sirvent, que repetirá el día 9. El concurso se celebrará entre el 15 y el 24 de junio, con diez disparos.
