El Ayuntamiento de Alicante ha logrado terminar 200 nuevos nichos en la zona del ensanche del Cementerio Municipal Nuestra Señora del Remedio para poder realizar enterramientos los próximos cuatro meses. De este modo, el equipo de gobierno (PP) intenta acallar el goteo de denuncias de familias que no pueden inhumar a sus difuntos en los nichos que tenían contratados y por los que llevan pagando toda la vida.
El último caso es el de una viuda que quería inhumar a su esposo en una primera o segunda planta, para lo que pagaban a una aseguradora 900 euros anuales, pero solo había disponibles, cuando el hombre falleció, plazas en un quinto piso. Como alternativa ofrecieron a la familia la incineración, que finalmente aceptó. Los operarios dijeron que no era responsabilidad del camposanto, arremetieron contra las aseguradoras y advirtieron que, de continuar la situación, no se podría enterrar a nadie.
Por tanto, estos 200 nichos alivian la situación aunque temporalmente. Según trabajadores del Cementerio, en verano la media de enterramientos en nichos es de unos diez a la semana, por lo que los nuevos 200 permitirán facilitar los enterramientos por un periodo entre cuatro y cinco meses.
Esto porque, según explican los operarios, en primavera y verano hay menos fallecimientos. En invierno hay días con cuatro entierros, por lo que darían para menos. Recuerdan, no obstante, que hay familias que tienen tumbas en propiedad que no necesitan una nueva, y concesiones caducadas que se están recuperando.
Cuatro bloques
El proyecto de ampliación del Cementerio consta de tres módulos, de 200 nichos cada uno, y de un cuarto con 104 más, en total 704. Ahora acaba de terminarse el primer módulo y el resto se prevé que estén disponibles para julio, según afirmó ayer el concejal de Infraestructuras y Mantenimiento, Israel Cortés. El coste es de medio millón de euros.
Estos 700 nichos se construyen en una parcela denominada «El descanso», con terrenos que fueron expropiados en otoño por el Ayuntamiento para garantizar los enterramientos a un año vista. La cifra de personas que se inhuman al año en este recinto ronda las 1.500. «Somos conscientes de que nuestro cementerio debe de estar perfectamente dimensionado de acuerdo a las necesidades de nuestra ciudad. Y para ello hemos previsto una partida presupuestaria de cerca de 1,5 millones de euros en los presupuestos de 2019 para construir, en un futuro cercano, más de 2.000 nichos, que darán una solución definitiva de cara a los próximos años para nuestra ciudad», dijo ayer Cortés.
El problema de la falta de espacio para nuevos panteones, tumbas de suelo y más nichos está relacionado con el bloqueo del plan de ampliación del camposanto, que se empezó a redactar hace 14 años. Un proyecto que contempla duplicar la extensión del Cementerio de 1918 con espacios para los ritos musulmanes y judíos, parque de cenizas, tanatorio-crematorio, y recinto de mascotas. Actualmente en el Cementerio hay 166.000 personas inhumadas.
Por otra parte, el Ayuntamiento aprobó ayer iniciar una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana para permitir la ampliación del Parque Científico de la Universidad en 800.000 metros cuadrados, reconvirtiéndolos en suelo urbanizable.
El planeamiento propuesto por la Universidad tiene por objeto consolidar y desarrollar todo el sector, sentar las bases de un nuevo espacio físico que permita conjugar las necesidades de ampliación de espacios docentes y compatibilizarlo con otros vinculados a actividades empresariales innovadoras y de base tecnológica, según destacó la edil de Urbanismo, Mari Carmen de España.
La modificación puntual del PGOU se realiza en el marco del convenio de colaboración firmado por la Universidad de Alicante y el equipo de gobierno municipal (PP) en octubre de 2018. No obstante, será la Generalitat la que tenga que aprobar definitivamente la expansión, que da por lo tanto sus primeros pasos.
