El Puerto de Alicante ha asegurado hoy en un comunicado que durante 2018 evitó la emisión a la atmósfera de 1.177 toneladas de CO2 tras haber apostado por las energías renovables para el suministro eléctrico, y de esta forma se exigió, en los pliegos de prescripciones técnicas, para la contratación de la energía suministrada.

En él se solicitaba la certificación, por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, de la procedencia de la energía eléctrica, para que toda ella proviniera de fuentes renovables, cuya emisión de CO2 a la atmósfera es nula.

"Si bien la energía que se recibe a través de la red eléctrica es exactamente igual, su procedencia queda acreditada por los certificados de Garantía de Origen, y su forma de producción es completamente limpia, ya que no se producen gases de efecto invernadero, ni emisiones contaminantes, para su creación", según el Puerto.

Según los datos de 2018 de Red Eléctrica de España, la Autoridad Portuaria ha evitado la emisión de 1.177 toneladas de CO2, cifra especialmente importante si pensamos que estamos hablando, en cifras aproximadas, de que esa cantidad de CO2 llenaría la capacidad de más de 580 piscinas olímpicas, en términos de volumen, o supondría las emisiones contaminantes, de la circulación anual de más de 800 vehículos.

Además de la contratación de la energía renovable, que abastece toda la zona portuaria, la sede de la APA dispone de paneles solares en su azotea, que abastecen un gran porcentaje del consumo realizado por las oficinas, si bien está preparándose un proyecto para aumentar esa cantidad, haciendo más autosuficiente el edificio.