El asfalto de la calle Garbinet se está levantando y sacando a la luz las vías del antiguo tranvía que recorría la ciudad de Alicante hasta que fue desmantelado en el año 1969.

El socavón, a la altura del número 64 de la calle, ha dejado al descubierto una parte de los raíles que permitían el paso de las máquinas por esta larga calle de Carolinas Altas. En concreto era la línea 2 la que enlazaba este barrio con el centro de la ciudad, como recuerda Aitor Escorza, presidente de Railia, el Instituto de Historia Ferroviaria de Alicante. «Inicialmente esta línea llevaba desde el Ayuntamiento a la zona de la Bola de Oro y circulaba, entre otras, por la calle San Vicente, Sevilla, Poeta Zorrilla y Jaime Segarra».

Con el paso de los años esta línea sufriría modificaciones, primero suprimiéndose el tramo entre la Explanada y Alfonso El Sabio y más tarde, a partir de 1963, prolongándose hasta el barrio de Virgen del Remedio. Después se fusionaría en ella la línea 8, que llevaba al barrio de Benalúa.

Declive

Hasta el año 1856 la red de tranvías estaba gestionada por una empresa privada, hasta que en ese año fue asumida por el Servicio Municipal de Tranvías (SMT). El paulatino deterioro de la red del tranvía, así como el mal estado en el que se encontraban los vehículos, llevó al Ayuntamiento de Alicante a desmantelar este servicio. Los cambios sociales de la época también se imponían y los coches y los autobuses tomaron el relevo como medio de transporte en la ciudad.

«El cierre de la red se produjo el 14 de noviembre de 1969. Precisamente, las dos únicas líneas que quedaban en servicio entonces eran precisamente la línea 2 y la 6, que llevaba a Pla-Hospital», explica Aitor Escorza. El paso de los años, cree el presidente de Railia, «ha mostrado que fue un error, puesto que la ciudad ha recuperado el tranvía y algunas de las líneas por las que circulaba en sus inicios, como la de San Vicente».

Railia es partidaria de que, en la medida de lo posible, se conserven los vestigios que van apareciendo del antiguo tranvía de la ciudad. Un ejemplo es la vía que salió a la luz durante las obras de Pintor Gisbert y de la que se ha conservado, de manera visible, una parte. Sin embargo, estas actuaciones no son siempre fáciles de acometer, «por el tipo de obra que hay que llevar a cabo y porque pueden suponer un riesgo para los ciclistas». En este sentido, Escorza cree que lo mejor sería poder disponer de un museo o un espacio de interpretación para mostrar estos elementos de la antigua red de tranvías.

El presidente de Railia recuerda además que en la localidad valenciana de Torrent, en unas instalaciones propiedad de Ferrocarriles de la Generalitat Valenciana, se conserva un tranvía entero de los que recorrieron la ciudad de Alicante.

Diez metros de vías a la vista en Pintor Gisbert

El Ayuntamiento de Alicante decidió integrar hace año y medio 10 metros de antiguas vías del tranvía en un tramo de la calle Pintor Gisbert. Las vías pertenecían a la antigua línea 5, que unía San Blas con el Mercado Central y que pasaba por Benito Pérez Galdós y la calle Calderón. Los vestigios aparecieron en el transcurso de unas obras de saneamiento de la red de aguas pluviales y el Ayuntamiento de Alicante decidió recuperar los raíles, junto a los adoquines, y trasladarlos al almacén municipal de la Finca Reyets. Tras diferentes reuniones entre la Concejalía de Urbanismo y de Cultura, ambas entonces en manos de Guanyar, se optó también por recuperar una muestra del material del antiguo tranvía y trasladarlo al centro de Las Cigarreras, donde se procedió a su catalogación.