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Paralizan las obras de la Tesorería por riesgo de amianto y falta de seguridad

Los delegados de Prevención exigieron suspender la reforma hasta que se garantizara la integridad de los 200 trabajadores

Los delegados han advertido del mal estado de los pilares y forjados del edificio. HÉCTOR FUENTES

La Inspección de Trabajo ha paralizado las obras de rehabilitación de la Tesorería General de la Seguridad Social de Alicante, en las plantas segunda y tercera, hasta que se tenga certeza de la inexistencia de fibras de amianto en su composición y se garanticen las medidas de seguridad para los 200 trabajadores que compatibilizaban su trabajo ordinario con el de las obras.

El edificio de la Dirección Provincial de la Tesorería, situado en la calle Enriqueta Ortega, estaba siendo rehabilitado por la realización de obras de sustitución del solado, de cuadros eléctricos y de telecomunicaciones. Previamente al inicio del proyecto, los delegados de Prevención apuntaron que, según la legislación referente al amianto, se debería haber realizado un análisis ejecutado por un laboratorio autorizado que confirmase su inexistencia.

La Tesorería General aportó varios escritos donde negaba la existencia de amianto, pero en ninguno de ellos aparecía ningún estudio o ficha técnica de los elementos de obra utilizados en el año 1988, fecha en que se realizó la instalación de los suelos vinílicos utilizados, tal y como explicaron los delegados en su denuncia: «En el estudio de seguridad de la obra no consta la no existencia de amianto, tal y como es preceptivo, ya que el edificio se encuentra entre aquellos construidos en las fechas que el INSTH indica como de riesgo».

Los delegados explicaron que dado que en el momento de redacción del proyecto no se realizaron las catas para comprobar el estado de los suelos en las diferentes plantas, en esta obra se decidió subir los suelos una media de siete centímetros a basa de hormigón para las conducciones. Esto supuso, según apuntaron, un incremento de peso considerable dado que la superficie a tratar es de 4.800 metros cuadrados aproximadamente: «Dicha actuación se inició en varias plantas sin el estudio previo de incremento de cargas, el cual hemos solicitado y aún no hemos recibido ya que se está elaborando y se nos dice que tardará».

Los delegados de Prevención de la Administración General del Estado en Alicante y la delegada de sección sindical, con el apoyo expreso de la junta de Personal de la administración General del Estado, dio conocimiento al comité de Seguridad y Salud y solicitó que se paralizaran las obras de manera cautelar hasta que se acrediten las condiciones de seguridad e higiene previstas en el RD 396/2006. También pidieron que se suspendiera provisionalmente la rehabilitación hasta que se aporte el estudio de cargas que garantice las condiciones de seguridad del edificio. Por último, exigieron que el proyecto no se retome hasta que se implementen las medidas de seguridad de los ocupantes del edificio, ya que los trabajos del resto de plantas se están realizando con los operarios en el interior «sin tener en cuenta sus condiciones de trabajo, ya que ni siquiera se ha sectorizado la climatización, por ejemplo», tal y como expresó la junta de Personal a la Inspección de Trabajo.

En el transcurso de la visita que la inspectora de Trabajo realizó al edificio, se comprobó que se estaban realizando obras de sustitución del solado que podrían originar riesgos para la seguridad y salud de los trabajadores y empleados públicos que prestan servicios en dicho centro de trabajo, que acoge semanalmente a más de un millar de usuarios procedentes de toda la provincia. La inspectora aseguró que desconocía la posible presencia de material con contenido de amianto en las zonas del edificio que estaban siendo objeto de rehabilitación, añadiendo que «por la fecha de construcción del edificio y de los materiales empleados en aquella época podría ser posible y resultar peligroso al manipularse con ocasión de la obra».

También mostró sus dudas por la posible sobrecarga de los pilares por la elevación de los forjados, posibles riesgos para la salud del personal, además de los riesgos derivados de disolventes utilizados para la colación del nuevo suelo de vinilo. Como consecuencia, la Inspección solicitó los informes pertinentes y la aportación de la documentación acreditativa y fichas de seguridad, exigiendo la adopción inmediata de las medidas preventivas y garantizando la seguridad e integridad física del personal en todo el edificio. Con fecha de 11 de marzo, la Inspección Provincial pidió a la Tesorería General un análisis de fibra de amianto en el solado y paralizó los trabajos hasta que se tenga «certeza absoluta» de su inexistencia en la composición.

Con esta paralización se dio respuesta a las peticiones de los delegados de Prevención a la Inspección. Además, se requirió el almacenaje de material en zonas en las que se garantice su resistencia, así como la manipulación de cargas con precaución y por medios mecánicos. La Inspección puso como ejemplo el depósito de tableros de mesas sobre la estructura del atrio en la segunda planta, dándose instrucciones verbales por parte de la inspectora a los representantes de la TGSS de su retirada inmediata. También se trató el incidente de la caída de una balda metálica en la escalera de acceso de la primera planta a la planta baja.

Fuentes cercanas aseguraron a este medio que las obras han generado un gran malestar y nerviosismo entre los trabajadores, que han exigido medidas urgentes en aras a que se garantice su seguridad y la de los usuarios de la Tesorería.

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