El equipo de gobierno del Partido Popular renegociará con el Puerto el convenio firmado para la oficina de Turismo, que prevé que la instalación permanezca en su polémico emplazamiento durante quince años, para cambiarla de ubicación antes de agotar ese plazo. La concejal de Turismo, Mari Carmen de España, aseguró ayer que buscarán «una ubicación idónea, acorde con la instalación de la mayor oficina de Turismo de la ciudad». En estos momentos la oficina de Turismo se levanta al principio de la explanada del Puerto con una estructura desmontable.

No obstante, la edil aseguró que «lo que no vamos a hacer, porque nos parece irresponsable, es tirar a la basura 700.000 euros que ha costado levantar esta instalación, más el refuerzo del parking del Puerto, que costó 90.000 euros más».

«Ahora toca trabajar con responsabilidad y objetividad y solucionar la herencia del tripartito», afirmó De España. En cualquier caso, el lugar idóneo, aunque aún no se ha planteado, será en el mismo entorno. «El lugar se escogió porque esa zona es sitio de recepción de visitantes, pero había otros proyectos y se descartaron», desveló la concejal. Entre estas posibilidades habló de la rotonda del puerto, delante del Hotel Meliá o en la esquina con la plaza del Mar. «Tendremos que ver las dimensiones de la instalación y el suelo disponible», concluyó.

Además, De España se mostró muy crítica con el anuncio del portavoz municipal de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, de llevar a Fiscalía las obras de la oficina de Turismo. «El convenio se aprobó con Pavón en el gobierno», recordó la concejal. Es más, «se aprobó en una Junta de Gobierno Local a la que no acudió el entonces alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, y que presidió como vicealcalde el propio Pavón», aseguró la portavoz del equipo de gobierno. «Entiendo que leyó la documentación puesto que el proyecto actual se aprobó allí. Además era miembro del consejo de la Autoridad Portuaria, que es la que autoriza la concesión del suelo para instalar la oficina», ironizó. «Pavón pudo haber paralizado la instalación en su momento, pero no lo hizo, la aprobó», zanjó la edil. «Nosotros nos hemos limitado a dar término a un trámite que ya estaba casi finalizado y denegamos la licencia de obras porque allí no se permiten obras, de ahí que solicitáramos un informe para que se justificara que la estructura es desmontable», justificó De España, para quien «a quien hay que pedir responsabilidades es a los que están ahora en la oposición, que fueron los que consintieron que esa estructura se esté levantando».

Reacción de la Generalitat

Turisme Comunitat Valenciana, el ente de promoción y gestión del turismo en la Comunidad Valenciana, se desmarcó ayer de la polémica que se abierto en Alicante por las dimensiones de la oficina de Turismo de la plaza del Puerto, al asegurar que la Generalitat se ajustó al proyecto que le presentó el Ayuntamiento de Alicante, gobernado en una primera etapa por el Tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís) y en los últimos doce meses (se cumplen el 19 de abril) por el PP. Un portavoz autorizado del departamento que dirige Francesc Colomer, reiteró que tanto la ubicación como el proyecto constructivo fueron decisión municipal, «la obra cumple con la legislación urbanística y nosotros invertimos 700.000 euros porque consideramos que Alicante necesitaba un elemento icónico como oficina de Turismo, pero la ubicación se decidió en el Ayuntamiento».

«La realidad es que el proyecto fue avalado por dos gobiernos municipales distintos y con la opinión a favor unánime del sector turístico y no se recibió nunca ninguna alegación en contra en los procesos de exposición publica. El Ayuntamiento decidió la ubicación», subrayaron desde Turisme. El diseño fue a propuesta del Patronato Municipal de Turismo de Alicante que dependía del PSOE en el Tripartito, pues «se buscaba algo icónico, singular, que fuese un referente turístico en si mismo en una ciudad de primer nivel como es Alicante», aseveraron las fuentes.

«Por nuestra parte, máximo respeto a las decisiones que toma la ciudad. No hubo alegaciones en contra en la fase de información pública. Ellos aportaron el proyecto constructivo. Nosotros lo recepcionamos y la oficina técnica de la Conselleria de Hacienda lo aprobó antes de licitar nosotros el concurso de obras», subrayaron desde Turismo. «Se ajusta perfectamente a la normativa urbanística. De hecho fue el propio Ayuntamiento quien tramitó esos permisos de obras. Además lo hizo con el PSPV y también con el PP, que tuvo un tiempo parado el proyecto porque quiso volver a revisarlo todo con detenimiento. Nosotros hemos aguantado el presupuesto durante todo el tiempo necesario porque consideramos que Alicante lo merece como destino turístico».