Un menor ha quedado atrapado en el interior de la cueva de Bolunini, en Beniarbeig. Rápidamente, los Bomberos del Servicio de Extinción y Prevención de Incendios (SPEIS) del Ayuntamiento de Alicante se dirigen hasta el lugar, inspeccionan la zona, localizan a la víctima y preparan todo lo necesario para sacarle del socavón lo antes posible. El rescate resulta complicado, aunque en esta ocasión el cuerpo cuenta con un punto de ventaja: la víctima es de plástico, todo se trata de un simulacro.
La maniobra arranca con la localización de la cueva, para lo que el operario Nacho Delano y otros de sus compañeros se establecen en el puesto de mando avanzado y controlan un dron que sobrevuela la zona para dar con la boca de acceso.
Los equipos suben entonces la montaña en compañía de Loida Moya, profesora del ciclo de Emergencias el IES Da Vinci, y Narciso Ayuso y su perro de rescate, uno de los tres con los que cuenta el SPEIS. Todos los intervinientes se sitúan, tras cerca de veinte minutos de subida a pie, en la zona caliente, junto al hueco que permite la entrada al espacio.
«La morfología de la cueva se parece mucho a lo que podría ser una estructura artificial colapsada. Es una base de entrenamiento ideal porque encontramos bloques, fisuras, pozos, diaclasas...», señala el coordinador. «Se trata de un escenario muy similar al que se puede encontrar cuando un edificio se colapsa por la actuación de un terremoto», añade Llopis.
Los equipos se adentran en la maravilla natural y se cuelan por todos los recovecos para dar con el adolescente, representado con un maniquí. La unidad canina le localiza cuando el reloj roza las 11 horas.
Existe la posibilidad de sacar a la víctima en camilla a pie, pero el equipo quiere aumentar la complejidad, para lo que montan sistemas mecánicos con tirolinas para desplazarla por la cavidad hasta llegar a la superficie. No obstante, el montaje se hace con sumo cuidado para no dañar la naturaleza de Bolumini.
La unidad de búsqueda y rescate de personas es la que acaba de salvar al joven. «Nos entrenamos para este cometido con la esperanza de llegar a ser una unidad reconocida por el Ayuntamiento de Alicante», explica el sargento Ramos.
Si la liberación de una persona atrapada en una zona de difícil acceso era algo que ya controlaban estos bomberos, ahora escriben holgados y con mayúsculas su «preparados para el rescate».
El operativo
Sobrevuelo de la zona
Un equipo gestiona la entrada y guía a los intervinientes con la ayuda de un dron, un gps y mapas desde el pie de la montaña
La unidad canina
Las técnicas de búsqueda se realizaron mediante la participación de la Unidad Canina, encargada de coordinar las labores de incursión rápida, búsqueda de la víctima y guiado del operativo
Distintos equipos intervienen en el simulacro de rescate
Distintos indicativos se reparten la gestión de maniobra, control, coordinación y seguridad en la cueva
