«Si, el azafrán para los arroces y el orégano para el tomate y los macarrones que me gustan mucho», afirma Javier Ortiz mientras fotografía todo lo que le llama la atención de la exposición, desde los botes de distintas pimientas hasta la sal del Himalaya. Todo ello con la ayuda de su inseparable mujer, Tirsi Macías, que le acompaña «en todo lo que puedo. Hacemos muchas cosas juntos».

Para Macías el taller organizado por el Museo de la Universidad de Alicante y la fotógrafa de INFORMACIÓN Pilar Cortés en colaboración con la Asociación de Familiares de Alzhéimer de Alicante (AFA) es «una auténtica maravilla». «Todo esto les viene muy bien para salir, relacionarse, hablar. Yo veo que después de actividades así se siente más seguro».

Este es precisamente el objetivo del taller. «Previamente hicimos un taller de fotografía y poesía. A través de la palabra los miembros de AFA elaboraron unos textos y las fotos que les sugerían. Esta es la segunda parte. Aquí se utilizan las especias para estimular los recuerdos relacionados con los olores y los sabores», explica Pilar Cortés.

«Uno de los recuerdos que más perduran es el olfato y hemos aprovechado que estaba aquí la exposición de Carmencita. La idea es utilizar la vista, el oído y el olfato para estimular sus recuerdos», añade.

El plan es unir los dos talleres y realizar una exposición con las fotografías que los enfermos de alzhéimer han realizado.

También es importante la colaboración de los cuidadores. «Van en equipo y los familiares también toman fotografías además de ayudar a hacerlas», indica la fotógrafa.