Acudo al Fórum de Excelencia Directiva Fexdir 2019, con la intención de poner en práctica algún experimento sobre networking. Pero Luis Barcala, alcalde de Alicante, pasa delante de mí. No me lo pienso dos veces: le abordo cuando ya salía por la puerta del ADDA para ir a comer (pienso "ahora o nunca"), y, al decirle mi nombre, recuerda inmediatamente el análisis que hice de su discurso de presentación de candidatura (puedes leerlo pinchando aquí). Me dice sonriente que le gustó mucho y que, aunque hubiera preferido que concluyera que lo había hecho todo perfecto, está muy de acuerdo con mis conclusiones sobre su estilo de comunicación. Con este cumplido, Barcala, me predispone hacia una relación positiva con él. Aprovecho ese buen comienzo para pedirle una entrevista, a pesar de no estar presente su responsable de comunicación. Duda unos segundos, pero finalmente cede amable a mi petición.

¿Sus asesores le dan alguna indicación sobre comunicación no verbal o cuando sale Ud. a hablar en pública gestiona sólo?

Siempre hay una parte que es "como te sale", ya te lo pueden decir, porque tienes hábitos arraigados de mucho tiempo y, al ser abogado, tengo la costumbre de intervenir en juicios. Es otro contexto distinto, los vicios que puedo tener en intervenciones con público o en el ámbito político, a veces se ven los "dejes" del otro foro. Y sí, los asesores están ahora mismo muy encima de algunos gestos, las posturas...

¿Y qué le dicen?

Me corrigen. En general, el mayor problema de la gestualidad suele ser las manos: ¿qué hacer con las manos? Cuando tienes un atril puedes agarrarte. Cuando no lo tienes, las manos, o acompañan el discurso o van por otro lado. Y ése suele ser uno de los grandes hándicaps: conseguir que las manos refuercen el mensaje que estás mandando de forma oral.

¿Qué es más difícil: hablar delante de los votantes como alcalde o candidato o hacerlo delante de un juez?

Son contextos totalmente distintos. Será que llevo veintisiete años como abogado y, al final, no es delante del juez lo que te intimida, es delante de tu cliente. Y eso es lo mismo que te intimida cuando estás delante de un foro donde son compañeros de partido, militantes, simpatizantes o es gente que solamente viene a escucharte. Normalmente la responsabilidad más grande la tienes o entre los que más conoces o entre los que quieres que te conozcan. Eso es lo que a mí me supone más responsabilidad. Quienes no me conocen, probablemente sólo tengo una oportunidad de dirigirme a ellos y en el cara a cara para que vean realmente cómo soy. Porque normalmente hay una diferencia entre la imagen que la gente se hace antes de hablar conmigo y la imagen con la que se quedan después de haber conmigo.

¿Y en qué cree que se diferencian esas dos imágenes?

Yo soy muy tímido por naturaleza, aunque parezca lo contrario y me dedique a esto. Y esa timidez me ha hecho siempre ser más reservado o no ser tan locuaz como pueden ser otras personas. Y se puede interpretar como que eres un poco distante. Hasta que yo tengo la oportunidad poder estar hablando de las cosas que importan y lo que quiero trasladar. Me importa mucho transmitir, y la política me ha dado la oportunidad de ganarme el derecho a ser escuchado y, por tanto, a decir muchas cosas que llevo dentro.

¿Ha hecho alguna formación en oratoria, para hablar en público?

En mi caso, es la práctica de años, no se me da mal ni construir el discurso ni luego expresarlo. Pero sí que he hecho algún curso de oratoria general, que me han servido para pulir algunos defectos o reforzar algunos conceptos.

¿Es Ud. consciente, cuando está haciendo un mitin o un discurso de que su comportamiento no verbal puede jugarle una mala pasada? ¿Está pendiente de eso o se concentra en su discurso verbal?

Siempre previsualizo e interiorizo el discurso, tanto si se trata de unas conclusiones en una sala de vistas en un juzgado como si es un mitin. De esta forma, siempre hago mejores discursos si no tengo que recurrir a ningún papel y no tengo que leer nada. Si tengo que leer, soy consciente de que pierdo mucho. Cuando era estudiante siempre elegía hacer los exámenes de forma oral. Cuando previsualizo, me veo dando el discurso, y trato de corregirme. En el momento en el que empiezo, y eso es una regla de oro, las primeras frases son esenciales para hacer un buen discurso. Si no tienes un buen arranque, no harás nunca un buen discurso y no podrás comunicar absolutamente nada. Como decía Gabriel García Márquez, "el primer párrafo de una novela es determinante para que el lector siga leyendo". Pues en un discurso pasa lo mismo. Debes enganchar con la primera frase, y eso es lo que tienes que llevar muy bien preparado, y, a partir de ahí, es concentración pura y dura: yo no veo ni la cantidad de gente que hay ni el entorno en el que estoy. Así fue como pude hablar delante de mil cuatrocientas personas cuando vino Mariano Rajoy al ADDA, y eso que era mi primer mitin. Eso mucha gente no lo sabe: mi primer mitin fue ahí, directamente, con el Presidente del Gobierno.

En alguna comunidad autónoma se está empezando a impartir la asignatura de oratoria en colegios o institutos para enseñar a los más jóvenes a hablar en público. ¿Cree que en Alicante debería introducirse? ¿Lo ve interesante o no tiene tanta importancia para Ud.?

Si recordamos los inicios de las universidades o las academias en Grecia, una de las asignaturas era "oratoria" precisamente. No es que crea que es importante, es que creo que es indispensable. Hoy por hoy, mientras "whatsapp" no lo remedie, nos comunicamos oralmente, y la comunicación oral es la comunicación personal por antonomasia, incluyendo la parte verbal y no verbal. La oratoria es indispensable, entre otras cosas, para tener la capacidad de trasladar lo que estás pensando. Tenemos la escritura, pero la vía oral es indispensable.

¿Está favoreciendo Alicante la generación de negocio a través de eventos como éste?

Totalmente. Eso forma parte de una estrategia que es modelo de ciudad. Nosotros nos pusimos a reflexionar hace ya tiempo sobre cuál era el modelo de ciudad, cómo debía despegar y cómo debía afrontar el siglo XXI una ciudad como Alicante que, básicamente, es una ciudad de servicios. Reinventarse es necesario, pero hacer experimentos que son locuras es absurdo. Por tanto, industrializar una ciudad como Alicante, dedicada al servicio, sólo y exclusivamente cabe en un nicho totalmente novedoso y abierto y disponible como es la industria tecnológica y las nuevas tecnologías. Ésa es la gran apuesta. Porque está por cubrir y el proyecto "Alicante Futura" consiste básicamente en convertir Alicante en la capital mediterránea de las nuevas tecnologías. A eso va orientado todo el despliegue de actividades, haciendo que Alicante se convierta en el foco de discusión, de reflexión, de debate, tanto entre los especialistas como entre los empresarios, que son los que, en definitiva, deben terminar ejecutando y aplicando todas esas nuevas tecnologías. Al mismo tiempo, nosotros asumimos el papel que, como Administración, nos corresponde como impulsora y coordinadora y aprovechamos todas las iniciativas, desde "Distrito Digital", promovido por la Generalitat, el Parque Científico de la Universidad, la disponibilidad de suelo para la instalación de industrias sostenibles y no contaminantes en el puerto, así como las infraestructuras, para lo que recurriremos al Estado. El Ayuntamiento coordina y diseña el modelo de ciudad y hace que todos los agentes rememos en la misma dirección. Y creo que estamos en el momento perfecto, creo que se dan todas las condiciones para conseguirlo.

Apago la grabadora. A pesar de ser la hora de comer y tener que volver en breve al Fórum para reanudar la sesión de la tarde, Barcala se queda un buen rato hablando conmigo. Me dice "ahora te voy a entrevistar yo". Se interesa por mi trayectoria y me cuenta algunas anécdotas y curiosidades. Sin duda, Barcala se desenvuelve mejor en el plano corto que en los grandes eventos.