El Ayuntamiento de Alicante y la Subdelegación de Gobierno han acordado reforzar la vigilancia por parte de los Cuerpos de Seguridad en la zona de Agua Amarga para impedir el acceso de caravanas y la acampada irregular de estos vehículos en esta zona costera de la ciudad.

Tampoco se permitirá el acceso desde la carretera de Urbanova a los caminos que llevan a la zona de descampado donde estacionaban autocaravanas. La vigilancia conjunta se establece con una mayor presencia de la Policía Local en la zona y de la Guardia Civil a través del Seprona. A la reunión ha acudido por el Ayuntamiento de Alicante el edil de Seguridad, José Ramón González, que ha sido recibido por la subdelegada, Araceli Poblador.

Las dos administraciones se han reunido para dar solución a la concentración de estacionamientos de vehículos de autocaravanas en el entorno de Agua Amarga en unos terrenos que son zona de servidumbre y de dominio público marítimo terrestre.

El acuerdo al que han llegado es el de controlar el acceso desde la carretera a los caminos que llevan a una zona del descampado, donde estacionan autocaravanas, a pesar de existir señalización prohibiendo la circulación de vehículos, con la excepción de los servicios municipales, y de estar prohibida la acampada de caravanas.

Para ello, desde el Ayuntamiento tienen previsto solicitar a la Generalitat esta medida de controlar el acceso, para lo que se elevará el correspondiente informe favorable por parte de la Dirección Provincial de Costas.

Asimismo también se ha decidido incrementar el control policial para evitar el estacionamiento y la acampada.

Desde el Ayuntamiento el edil de Seguridad ha destacado el talante de la subdelegación para llegar a este acuerdo con el que "ambas administraciones damos solución a un problema que existe para evitar así que se realice un estacionamiento indebido".

Antecedentes

El pasado verano, agentes de la Policía Local de Alicante desalojaron al menos una veintena de caravanas que estaban estacionadas en el entorno de Agua Amarga, entre la zona de la EUIPO y la playa de Urbanova. Los policías cumplían así la orden dada por el alcalde de Alicante, el popular Luis Barcala, que ordenó el cumplimiento de las ordenanzas vigentes, dependientes de los departamentos de Costas de la Generalitat y del Gobierno central.

Más recientemente, la Subdelegación del Gobierno, del PSOE, y el Ayuntamiento, del PP, se culpaban por la proliferación de vehículos en primera línea de costa. Mientras tanto, los vehículos campaban a sus anchas en el entorno de Urbanova y la EUIPO, desplegando toldos, sillas y mesas. Con la reunión de hoy dan un paso para intentar ponerse de acuerdo y atajar esta problemática.

Desde la institución encabezada por Araceli Poblador se aseguraba a principios de febrero que la "mayoría» de las caravanas que empezaron a proliferar de nuevo en la zona -entre el frontal de la EUIPO y la explanada próxima

a las primeras viviendas de Urbanova- están sobre un terreno que es competencia del Ayuntamiento, al situarse en la «servidumbre», en alusión a la «zona de paso».

Es decir, que tendría que ser la Policía Local la que debería actuar para impedir la acampada de caravanas en primera línea de costa. Sin embargo, cuando el pasado verano los funcionarios municipales actuaron, avisando a los turistas de la prohibición de aparcar en la zona e incluyendo su identidad en una base de datos para futuras multas si reincidían, el Ayuntamiento recordó que fue la Subdelegación del Gobierno la que aseguró que estaban invadiendo competencias del Seprona, perteneciente a la Guardia Civil.

Ante esa situación, que suponía una repetición de los hechos vividos el pasado verano, la Subdelegación del Gobierno solicitó un nuevo informe para que se clarificasen las competencias.

a fondo

Nadie quiere echar a las autocaravanas de Aguamarga