Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El acceso a los correos de los concejales de Alicante por parte de un edil de Cs infringe el Código Penal

Juristas aseguran que abrir correspondencia ajena es un delito por vulnerar la intimidad. El Ayuntamiento está obligado a garantizar la seguridad de sus emails

El concejal de Ciudadanos Juanfran Escudero. Álex Domínguez

El acceso no autorizado a los correos electrónicos de Alcaldía, de los grupos políticos municipales, de los concejales alicantinos y de sus asesores por parte del edil de Ciudadanos Juanfran Escudero tras descubrir «por azar» una clave maestra pone en serias dudas la seguridad del sistema informático del Ayuntamiento de Alicante, que, según los expertos, es el responsable de garantizar la seguridad de la correspondencia online de la Corporación alicantina.

Los técnicos informáticos municipales están inspeccionando los ordenadores de todos los grupos municipales para hacer un informe que en 72 horas deberán entregar a la Agencia de Protección de Datos. La entidad clarificará si se ha cometido algún delito. El informe se hace con base en el rastro de los accesos no autorizados al correo electrónico.

La violación de la restricción del acceso a los mails, que pueden incluir información sensible sobre reuniones, comunicados y agendas, es un delito, según juristas consultados por este diario. Se infringe en este caso el artículo 197 del Código Penal al vulnerarse la intimidad y producirse «desvelación de secreto».

«Abrir un correo electrónico ajeno es un delito, igual que abrir una carta postal», coincidieron ayer dos juristas, aunque no quisieron entrar a valorar el caso sucedido el miércoles en el Ayuntamiento de Alicante por no tener suficiente información.

La Agencia de Protección de Datos determinará si se ha cometido un delito en Alicante con base a los informes municipales

La versión del grupo municipal de Ciudadanos es que el edil Juanfran Escudero se equivocó de clave y se dio cuenta de que se podía acceder a los correos del área de Alcaldía, de los concejales de los grupos políticos y asesores, tras lo cual dieron parte a Informática, que procedió a bloquear los correos. Más tarde, el edil matizó que introdujo la palabra Alicante por casualidad y que abrió su correo y el de otros compañeros de grupo y asesores de Ciudadanos, negando entonces cualquier intromisión en los correos de otros grupos municipales. Sin embargo, el jefe de Gabinete de Alcaldía explicó que un asesor de Ciudadanos le llamó para comunicarle la incidencia, que afectaba «a todos los correos» adscritos a Alcaldía, que incluyen los de los 29 ediles de la Corporación y asesores de los grupos políticos.

El vicerrector de Campus y Tecnología de la Universidad de Alicante, Rafael Muñoz, coincide con los juristas en que existe una responsabilidad al tratarse de datos privados. «Es un delito informático. Si accedo a tu correo, tiene pena. Es lo mismo que abrir una carta de otra persona. Luego está la Ley de Protección de Datos tan en boga», dijo el vicerrector, que habló de un fallo de seguridad del sistema que en principio quiere creer que se puede deber a un descuido.

Desprotección

También se podría derivar delito de una posible desprotección de la seguridad por parte del Ayuntamiento ya que las administraciones públicas están sujetas a la Ley de Protección de Datos, que deja claro que son las responsables de proteger cada dato incluso a niveles de seguridad mínimos.

«La ley obliga a guardarlos con seguridad, ya recoge este aspecto, y esto parece que el Ayuntamiento no lo ha dotado, por falta de presupuesto o por lo que sea», indica Francisco Maciá, profesor de Tecnología Informática de la Universidad de Alicante.

El también miembro del Instituto Universitario de Investigación en Informática señaló que es inadmisible que una administración pública, si este fuera el caso del Ayuntamiento, pueda haber dejado la «puerta abierta» a la intromisión de datos. Y puso un ejemplo: «Un ladrón no debe entrar en una casa aunque se deje la puerta abierta pero si es la administración pública quien la deja, puede tener problemas y le pueden reventar el sistema de seguridad». «Mientras más se invierta en la seguridad del sistema informático más difícil será que pase alguien. Aún así, si alguien quiere entrar, lo hará y lo reventará», dijo refiriéndose a los hackers.

Según el experto de la Universidad, aunque se pueda pensar que en la informática está todo resuelto, aún está en pañales. Considera que, en general, los ayuntamientos y otras administraciones no invierten lo que haría falta para mantener el nivel de seguridad que se requiere para tener una puerta lo más «acorazada» posible a las intromisiones ajenas.

El vicerrector de Tecnología de la Universidad recomienda al Ayuntamiento contratar un servicio de auditoría externa que determine el nivel de protección que tiene su sistema informático para clarificar qué fallos tiene y si hackean el sistema. Muñoz explicó que hace unos años pudo conocer el sistema de correos electrónicos del Ayuntamiento, y que, si no se ha cambiado, permitía que el administrador de correos pudiera verlos todos, por lo que si no se desactivó, puede haber estado así hasta ahora.

Compartir el artículo

stats