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Indignación en Salud Pública al mantener Sanidad el decreto por el que pagará a 1 euro la hora de guardia

Pagará a 1 euro la hora de guardia, entre «otras carencias», denuncian cuatro colegios profesionales

Indignación en Salud Pública al mantener Sanidad el decreto por el que pagará a 1 euro la hora de guardia

Máxima indignación. Los colegios profesionales de Médicos, Veterinarios, Enfermería y Farmacia no descartan ir a los tribunales si sale adelante el decreto de alertas en Salud Pública que la Conselleria de Sanidad acaba de sacar a exposición pública. Un decreto que regula las guardias que hacen estos trabajadores y que contempla pagar 250 euros brutos por semana, alrededor de 1 euro la hora. Representantes de todos los colegios ya mostraron su rechazo a este texto cuando estaba en fase de elaboración y se reunieron en enero con la consellera de Sanidad para trasladarle su malestar, un encuentro del que salieron satisfechos. De ahí su sorpresa tras comprobar, el pasado día 6, que el decreto se comenzaba a tramitar sin variaciones.

En la provincia de Alicante hay afectados 150 trabajadores, que deben estar de guardia y movilizarse para controlar, por ejemplo, brotes de enfermedades o intoxicaciones alimentarias. Fuentes de estos profesionales destacan que los 250 euros que Sanidad tiene intención de pagar por una semana de trabajo es una cantidad diez veces menor que la propuesta que realizó en 2006 el anterior ejecutivo en otro borrador que no llegó a ver la luz.

También alertan de que el borrador «tiene además otras carencias», como que las guardias localizadas no computan como tiempo trabajado. Además, «se aboca al personal a atender alertas, en ocasiones, en áreas de trabajo ajenas a su zona habitual y por tanto desconocidas». Tampoco cubre «toda la casuística de los eventos que requieren de una actuación urgente». El texto «tampoco aporta su­fi­cien­tes garantías para disponer de un equipo multidisciplinar cuando éste se requiera». Los afectados están preparando alegaciones al decreto y no descartan acudir a los tribunales para paralizarlo.

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