Miguel López disponía de herramientas con las que pudo manipular los dos cartuchos que acabaron con la vida de su suegra, la viuda de expresidente de la CAM Vicente Sala. La acusación particular que ejerce el abogado Francisco Ruiz Marco en nombre del hijo mayor de la víctima ha aportado un informe, cuya admisión solicita a la presidenta del tribunal popular, Francisca Bru, que así lo afirma.

Realizado por el Banco Oficial de Pruebas de Éibar sobre el material incautado en el domicilio del acusado, el informe técnico concluye que «es técnicamente viable obtener un cartucho con las especificaciones del 9 Browning long óptimas para efectuar un disparo a partir de un cartucho 38 Super Auto empleando algunas de las herramientas comunes descritas en los antecedentes». Entre el material localizado había varias sierras, tenazas, llaves inglesas, un prensa y una radial.

María del Carmen Martínez fue asesinada el 9 de diciembre de 2016 de dos disparos en el cabeza en el establecimiento de automoción que regentaba su yerno. Aunque el arma no ha sido localizada, las vainas halladas en el lugar del crimen permitieron saber que la munición había sido manipulada. Un primer informe descartaba con matices la relación entre las herramientas que el sospechoso tenía en su casa y las marcas que presentaban las vainas.

Además de este informe, en el escrito de personación presentado por Ruiz Marco se impugna la prueba pericial informática del móvil de la víctima realizada por Luis Enrique Hellín Moro y por hijo Jesús. El letrado plantea que se rechace en tanto que la defensa de López, a instancia de quien se ha realizado el estudio, ha propuesto la sustitución para el acto de la vista oral de Luis Enrique (el ultra antes llamado Emilio que mató a la joven vasca Yolanda González) por otro perito.

Para la acusación particular, «carece de fundamento legal (y de hecho la defensa no cita precepto alguno) sustituir a uno de los peritos por la circunstancia de la mera jubilación (...) cuando es el único perito con posibilidad de responder a las dudas, aclaraciones y demás preguntas que le puedan formular respecto al informe por él elaborado».

«Circunstancias poco idóneas»

Al margen de la contestada sustitución, Ruiz Marco expone también a la juez las «circunstancias acaso poco idóneas» de Hellín Moro «para el ejercicio de la función pericial-informática en un juicio por asesinato dada su condición de condenado por múltiples delitos, entre ellos el de asesinato y falsificación del carnet de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicaciones».

El acusador particular no solo aporta la sentencia que confirma estos hechos sino además la que también condena a su hijo Jesús, coautor del informe, por un delito de abusos sexuales a una niña de seis años. Y concluye que «si acaso el motivo de la anómala sustitución del señor Hellín Moro tuviera relación con la dudosa idoneidad para auxiliar a un Tribunal de Justicia, derivada del contenido de la sentencia acabada de aportar, parecería razonable solicitar también la sustitución de su hijo».

Renuncia a la prueba

De hecho, en el escrito presentado por la defensa de López, donde el acusado rechaza que le juzgue un tribunal popular y plantea que, de hacerlo, sea fuera de la Comunidad y a puerta cerrada, el letrado planea la renuncia a la prueba firmada por los Hellín y su sustitución por la elaboración de otro informe «a realizar por perito informático designado al efecto con titulación bastante», señala.

Los restos de ADN en una de las vainas

Ante el planteamiento del abogado de Miguel López de realizar otro análisis del ADN localizado en una de las vainas en un Instituto de Santiago de Compostela, el representante de la acusación particular recuerda que no se trata de una «prueba anticipada» sino de una «mera diligencia de investigación» cuyo tiempo para solicitarla ya pasó. Eso además de resaltar su inutilidad dado que lo que se busca es «una indagación genérica de alguien desconocido».