Los impagos del Consell sacaron ayer a la calle tanto a profesores interinos de toda la provincia como a trabajadores de los centros de menores y personas con discapacidades. En ambos casos los afectados, que rondan el medio millar de empleados del sector público, no han recibido su sueldo en los últimos meses y la administración intenta buscar soluciones urgentes para que cobren esta misma semana, según reiteraron ayer fuentes de la Conselleria de Hacienda.

Por la mañana, trabajadores de los centros de atención a menores tutelados y a personas con discapacidades protestaron frente al edificio PROP de la Generalitat por los impagos en el sector por parte de la Conselleria de Igualdad.

Según informa el sindicato CC OO los afectados en 45 centros en la provincia de Alicante suman cerca de 250 trabajadores, «que en algunos casos llevan hasta dos meses sin cobrar», afirma Toni Jiménez, delegado sindical.

Los contratos de gestión de estos centros acabaron en septiembre y desde entonces, según explican de la plataforma «Tutelados olvidados», están en una situación de «enriquecimiento injusto hasta que se tramiten los nuevos contratos. El problema es que no cobran el dinero por la gestión de estos centros». Las empresas han ido tirando de créditos del banco, «pero la situación es ya insostenible y de no cobrar en los próximos días se vería resentida la asistencia a los menores», aseguran.

Los profesores, por su parte, se concentraron por la tarde ante la sede del Consell en Alicante para reclamar las nóminas pendientes que han dejado de cobrar 270 interinos con sustituciones de plazas mayoritariamente.

Convocados por el STEPV, con el presidente de la Junta Provincial docente al frente, Pep Coll, también se sumaron los delegados de Fete-UGT, Javier Martínez y Alejandro Pérez Ortíz, que al igual que los sindicatos ANPE y CSIF han reclamado de Educación el pago inmediato a todos los profesores.

«Es una vergüenza que queden docentes que no han cobrado sus retribuciones y que esta deuda salarial se prolongue durante meses, como ocurre con los malos empresarios que dejan de pagar a su trabajadores», señalan desde UGT.

Testimonios

David Navarro, Carmen Poveda y Encarna reclaman a viva voz su sueldo. «No nos quejamos por quejarnos. Tu vida depende de tu sueldo. Haces todo lo que toca y cuando llega fin de mes y no cobras todo se desmorona», subraya Encarna. Procedente de Castellón, ha tenido que alquilar un piso para trabajar en Alicante y no puede seguir sin sueldo. «Queremos trabajar, de hecho cogí plaza lejos de donde vivo», lamenta.

No quieren saber si el cobro depende de Educación o de Hacienda, el caso es que no han recibido la nómina y ellos cumplen con sus trabajo. Carmen confiesa que a sus 37 años le daría vergüenza tener que pedir dinero a su madre y para colmo los primeros meses sí los cobró. Incluso se incorporó a trabajar un viernes con 38 de fiebre «para que no me tiraran de la bolsa», recuerda.

David Navarro, interino en un instituto de San Vicente, empezó el 6 de noviembre a trabajar y todavía no ha visto un euro.